‘La protección de la víctima en el proceso penal’ es el título de la tesis doctoral del profesor y jurista Xulio Ferreiro, ahora también alcalde de Coruña. El trabajo del profesor titular de Derecho Procesal en la Universidad de Coruña es, según su llamativo título, algo más que un compendio jurídico en defensa de las víctimas, en el supuesto de que así sea. Supongo que, más o menos, es lo que Ferreiro intenta demostrar con una tesis que se queda solo en el campo de la teoría. Porque lo que ahora promueve, defiende e incluso manifiesta, de palabra o físicamente, nada tiene que ver con el trabajo realizado por aquel joven y brillante profesor.
No es necesario hablar del pasado, sino desde las elecciones locales que le dieron, con el apoyo del PSOE, la alcaldía de Coruña. Y aun en una Galicia herida por la crisis, la ciudad herculina sigue siendo el motor económico de la Comunidad gallega. Si entendemos dónde está el poder financiero de Galicia.
Pues bien, Ferreiro y su equipo de excéntricos políticos no han hecho nada aceptable para la ciudad. Y todo lo que han tocado para intentar cambiar, suponemos que para mejorar, lo han convertido en algo de bajo coste. Por no decir en un deshecho que para recuperar habrá que invertir lo que no está escrito.
Lo más llamativo de todo es la política social. Para entendernos, las víctimas del proceso que, según Ferreiro, deben ser protegidas. El cambio del profesor, ahora político, en este terreno hunde su propia tesis doctoral. Es el conjunto de la ciudadanía la que está sufriendo el efecto contrario a su trabajo intelectual. Sería un chiste hablar de los okupas de la Comandancia, que no los quiere desalojar para evitar "un conflicto peor". Quién sabe si Ferreiro gastará un poco de dinero público en una app que permita a los okupas buscar más rápido.