Las banderas de los consistorios de Coruña y Oza-Cesuras, donde apareció el cadáver del niño de 11 años asesinado presuntamente por su padre, están a media asta. Ambos concellos decretarondos días de luto oficial por la muerte del menor asesinado por su padre durante el régimen de visitas, por lo que, desde ayer por la mañana, sus banderas ondean a media asta y ambas instituciones convocaron un minuto de silencio este miércoles, a las 12:00 horas, ante sus casas consistoriales.
El Parlamento de Galicia también se quedó callado ayer por la tarde durante sesenta segundos en señal de repulsa por la muerte violenta del pequeño coruñés. Y en el colegio San Francisco Javier, en Cuatro Caminos, donde estudiaba la víctima y trabaja la madre también se ha guardado este mediodía un minuto de silencio en memoria del niño.
La concejal de Igualdade e Diversidade, Rocío Fraga, explicó que el Concello había ofrecido a la madre del fallecido "todos los servicios que sean necesarios en estos días críticos, tanto a nivel de servicios sociales municipales como los vinculados a la igualdad, a la violencia de género y a la seguridad". El alcalde de Oza-Cesuras, José Pablo González Cacheiro, lamentó lo sucedido: "Esto no puede ocurrir".
Los jugadores del Deportivo también se han sumado hoy a las muestras de consternación por la muerte violenta del niño de Coruña presuntamente a manos de su padre. Futbolistas y técnicos han guardado un minuto de silencio para mostrar su repulsa por el crimen y expresar sus condolencias a la familia del pequeño.