La oleada de incendios forestales en Galicia no cesa. Este lunes ha quedado estabilizado el fuego en el municipio de Sober sin antes quemas 120 hectáreas. El foco de llamas avanzó muy rápido en los primeros momentos, por el viento y porque los servicios de extinción tardaron en llegas. La desolación y la impotencia han sido, una vez más, ver como la vegetación era pasto de las llamas. El alcalde de Sober, Luis Fernández Gutián, lo dijo claro y alto: "el incendio de Anllo fue provocado". Las 120 hectáreas arrasadas por el fuego se vienen a sumar a las más de 2.000 que han ardido desde comienzos de años. Se espera que con las lluvias anunciadas para este martes den una tregua a la ola de incendios en Galicia.
Un incendio forestal avanzaba anoche por una zona de monte próxima a la desembocadura del río Cabe en el Sil, en plena Ribeira Sacra. El fuego afectó a una zona de pino y matorral en el lado de la garganta del Cabe perteneciente al municipio de Sober. Los helicópteros que ayudaban en las tareas de extinción tuvieron que retirarse a las nueve de la tarde porque estaba a punto de anochecer, pero las llamas seguían avanzando en diferentes direcciones. La Consellería de Medio Rural da por estabilizado el incendio desde las seis de la tarde de hoy y si a primera hora de la mañana facilitaba una estimación provisional de cien hectáreas calcinadas, esta tarde elevaba la cifra a 120.
El fuego empezó poco antes de las seis menos cuarto de la tarde en las cercanías de Nogueira, en la parroquia de Anllo. El primer foco apareció al fondo de la ladera que llega al río y avanzó con mucha rapidez montaña arriba empujado por el viento. Poco más de media hora después había calcinado ya aproximadamente diez hectáreas y todavía no había llegado a la zona ninguna brigada forestal para tratar de controlarlo.
os primeros en llegar fueron tres brigadas helitransportadas que descendieron de sus aparatos en un claro del monte situado al lado de un sendero que comunica la carretera de Arxemil a Anllo con el lugar de Arroxó. Al otro lado de esa pista, los vecinos de esta parroquia tienen una gran plantación de castaños de apenas unos meses. Los servicios de extinción tomaron esa pista como base para tratar de atajar el fuego, apoyados primeros por sus helicópteros desde el aire y una hora después también por un camión cisterna. Pasadas las ocho de la tarde, y cuando el principal frente estaba controlado, surgía a varios cientos de metros de distancia un segundo foco.
Este incendio provocó una gran humareda visible desde el cercano cañón del Sil, pero también desde puntos más distantes, como el casco urbano de Monforte. Desde esta mañana, el viento está llevando el humo hasta el casco urbano de Ourense.
El alcalde: "fue provocado"
Por su parte, el alcalde de Sober, Luis Fernández Guitián, confirmó que los efectivos de la Consellería de Medio Rural siguen luchando contra el incendio que ya ha calcinado alrededor de cien hectáreas de monte arbolado en la parroquia de Anllo, además de lamentar la "impotencia" que produce un suceso de estas características, porque el fuego fue "claramente provocado".
El fuego comenzó en torno a las 17:50 horas y permanece todavía activo, al menos en uno de sus frentes, porque en el otro los medios de extinción de la Xunta de Galicia han conseguido controlarlo en las últimas horas.
En la extinción de ese fuego están trabajando 6 agentes forestales, 12 brigadas, 9 motobombas, 3 excavadoras y 5 helicópteros, por lo que Fernández Guitián confía en que "en pocas horas" quede ya "controlado".
"Son cosas que no sé por qué suceden. No deberían suceder. En estos momentos tenemos que ser duros, porque los vecinos lo están pasando mal", reconoció el regidor local, quien no tiene ninguna duda de que este incendio ha sido provocado.
"Claro que fue provocado. Cuando los medios controlaban el fuego en un frente aparecían nuevos focos. Hubo muchísimos focos y, además, en una zona complicada, de muy difícil acceso. En estos lugares, son siempre provocados", concluyó.