Las relaciones en Marea-Podemos para formalizar una coalición con la que concurrir a las elecciones autonómicas no acaban de plasmarse. El estancamiento está en el "partido instrumental" que pretenden las mareas. Y este desencuentro lleva a que Luis Villares, el magistrado del Tribunal Superior de Xustiza de Galiciz (TSXCG), propuesto por las mareas como candidato a la presidencia de la Xunta, rechace la "oferta" si Podemos no acepta el partido instrumental. Después de que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunciará que las elecciones serán el 25 de septiembre, ninguna de las dos formaciones tiene candidato ni listas. Y solo el nombre de Villares figura como "aspirante" a ser el candidato de En Marea.
Mientras la formación morada cerraba su consulta "telemática" para decidir si se presenta en solitario o busca una fórmula para ir en coalición con En Marea, el nuevo partido instrumental -impulsado por Anova, Esquerda Unida y Mareas en Común- aceleraba el ritmo de trabajo para tener su candidato a la Xunta la próxima semana.
Villares es el único candidato que, a día de hoy, manera en Marea. Pero tanto la coalición de las mareas como Podemos se enfrentan a un nuevo obstáculo ante la negativa de la formación morada -ratificada por la dirección nacional- de concurrir a las autonómicas como coalición y no como partido instrumental.
Estas condiciones por parte de Podemos amenazan con echar al traste la candidatura de Villares, que solo aceptaría ser cabeza de cartel por Coruña si el partido liderado por Carmen Santos se integra en el espacio rupturista bajo la fórmula de partido instrumental, al haber sido esto lo aprobado el pasado sábado por la asamblea de En Marea.
La elección de Villares por Coruña supondría que Xosé Manuel Beiras ya no repetiría como cabeza de cartel por esa provincia, como sucedió como punta de lanza de AGE en 2012. De hecho, su presencia en las candidaturas es una incógnita a tenor de su edad, pues en mayo cumplió 80 años.