Xaquín Fernández Leiceaga, aspirante a las primarias del PSdeG, y Gonzalo Caballero, militante vigués que no logró los avales necesarios para competir, oficializaron este martes en Santiago su acuerdo por la "renovación" del partido. El primero, profesor de Economía Aplicada de la USC y candidato avalado por la gestora, pretende lograr parte de los apoyos de Gonzalo Caballero en la fase final de una consulta prevista para este domingo y asícontrarrestrar la ventaja que le llevaba su rival, José Luis Méndez Romeu, portavoz parlamentario del partido y que cuenta con el apoyo de las agrupaciones de Vigo y toda la provincia de Pontevedra, Coruña, Ferrol, Costa da Morte, Ourense y parte de Lugo.
En la fase de recogida de avales, Romeu alcanzó los 2.337 frente a los 2.216 de Leiceaga, una diferencia de 321. Gonzalo Caballero se quedó en unos insuficientes 540. Sin embargo, este recordó hace días que el voto de cada militante es "secreto".
El candidato socialista en este proceso ha observado que en la carrera hacia la Xunta, en el seno de los socialistas gallegos, hay dos vías y, en su opinión, la de José Luis Méndez Romeu está "centrada en replegarse sobre sí mismo" con elementos "más tradicionales", lo que conduce "al fracaso y a una mengua de los apoyos sociales".
Sin embargo, ha explicado Leiceaga que su candidatura marca como prioritaria una "renovación" necesaria para que el PSdeG se aproxime "a las demandas de la sociedad". "Es necesario renovar dentro para ganar fuera", ha zanjado, y considera que el apoyo de Gonzalo Caballero y de los 844 avales que obtuvo en el proceso inicial es muy importante, asimismo, para garantizar la "unidad" en la organización.
Gonzalo Caballero ha apostado, además, por una "renovación" que permita al PSdeG cambiar sus formas de hacer política y materializar una apertura hacia los ciudadanos que permita que el próximo otoño los socialistas vuelvan a "liderar el Gobierno de Galicia". "Si hacemos las cosas bien - ha dicho Caballero- Leiceaga será el próximo presidente de la Xunta", ya que, bajo su criterio, considera que el PPdeG ha sufrido un importante "desgaste" y las opciones populistas situadas más a la izquierda del PSdeG "entienden los problemas, pero no saben darles solución".