Al final, como en los cuentos: todos comieron perdices. En Marea se presentará ante el electorado en los comicios generales del 26 de junio exactamente igual que como lo hizo el 20 de diciembre de 2015, es decir, con el formato de coalición y con los mismos candidatos en las cuatro provincias gallegas que entonces. Tras cinco horas de discusión, dirigentes de Podemos, Anova, EU, Compostela Aberta, Ferrol en Común, y Encontro por unha Marea acabaron por acordar este martes la repetición de la alianza, eso sí, después de que el partido liderado por Xosé Manuel Beiras advirtiese de su predisposición a romper en la misma reunión si no se permitía a las bases de las organizaciones de la coalición votar la fórmula jurídica a adoptar para los comicios generales.
Varios participantes en el encuentro certifican que Anova reiteró su exigencia de convertir a En Marea en partido, trámite que los nacionalistas se han adelantado a realizar ante el Ministerio del Interior, registro que finalmente no tendrá uso. Los nacionalistas defendieron dicha mutación electoral para demostrar que En Marea pretende realmente conseguir el grupo parlamentario propio que no obtuvieron como coalición y que no se conforma con volver a conformar un subgrupo dentro del de Podemos.
La insistencia en la argumentación por parte de Anova llevó al que volverá a ser cabeza de lista por Coruña, Antón Gómez Reino, a instar a los nacionalistas a abandonar la coalición, según relatan diversos testigos y confirman desde el partido de Beiras. Pese a que se reconoce que la ruptura llegó a sobrevolar la reunión, riesgo que el fin de semana también admitió que existía el veterano líder nacionalista, la conclusión de la reunión de la mesa de coordinación fue optar por repetir la apuesta del 20-D transigiendo Anova de sus exigencias.
Con la renovación del pacto, que tendrá que ser presentado ante la Junta Electoral antes de este sábado, la primera asamblea de En Marea, que se celebrará este domingo en Santiago, carecerá de poder decisorio y pasará a convertirse en el primer paso para tratar de conformar una alianza para las autonómicas de octubre.