El consejo de administración de Abanca ha acordado este viernes el que será su primer reparto de dividendos por un total de 315,5 millones de euros entre sus accionistas. De este modo, se pagará 0,1409 euros por acción, descontada la autocartera, mientras que el abono efectivo se hará el próximo 6 de mayo -sujeto a la retención fiscal (19%) que legalmente proceda sobre el importe bruto-. Así figura en la comunicación que este viernes ha realizado la entidad financiera a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El grupo liderado por Juan Carlos Escotet se llevará el grueso de ese dividendo de 315,5 millones. Banesco controla el 91% de Abanca, tras haber recomprado a la aseguradora Caser el 3% que poseía en la antigua Novagalicia.
Abanca superó los 330 millones de beneficio en 2015 -y casi su totalidad se reparte ahora en dividendos-, ejercicio en el que mejoró de forma sostenida su margen comercial, situó su rentabilidad en el 8,7% y elevó su solvencia, con una ratio 'CET1' de capital del 16%, muy por encima de los requerimientos del Banco Central Europeo (BCE).
Este acuerdo llega después de que la pasada semana el principal accionista de Abanca, Abanca Holding Financiero (que posee en torno al 91%), anunciase que adelantará al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en las próximas semanas 300 millones de euros, aplicables al pago aplazado de las tres cuotas pendientes por la adquisición del banco, en un proceso de subasta competitiva, en diciembre de 2013.
Juan Carlos Escotet es el principal accionista de Abanca Holding Financiero, quien había anunciado públicamente su intención de acelerar lo máximo posible el pago de las cuotas restantes de la compra de la entidad heredera de la fusión de las antiguas cajas gallegas.
Ese pago al FROB de 300 millones supone el abono de 100 millones aplicables a la cuota de cada año; cantidad que representa la totalidad de la cuota de 2016, el 50% de la cuota de 2017 y el 33% de la cuota de 2018.
Aunque en un principio en 2015 en su informe de resultados de 2014 Abanca apostaba por repartir un dividendo de 150 millones, posteriormente la junta de accionistas de la entidad decidió destinar su beneficio a mantener la solvencia del banco. Por ello, el de este año será el primer reparto de dividendos entre accionistas.