El presidente del Banco Popular, Ángel Ron, ha afirmado este viernes que las entidades financieras que forman parte del grupo de acreedores que tienen posiciones en la deuda de Pescanova defenderán sus intereses y los de la compañía durante el proceso de negociación del convenio, al tiempo que ha advertido de que lo lógico en estos casos es que "se repartan esfuerzos".
Durante su intervención en el Foro de la Nueva Economía, Ron ha destacado que los acreedores consideran que Pescanova es una empresa viable, por lo que están tratando de alcanzar un acuerdo "equilibrado entre los distintos intereses en juego". "Apostamos por ello", ha añadido.
Sin embargo, ha subrayado que no están de acuerdo con el convenio que se ha propuesto hasta ahora, defendido por Damm y Luxempart. "Pensábamos que nuestras expectativas eran compartidas por los accionistas de referencia. No hemos desistido en el afán de que la compañía tenga futuro. Estamos convencidos de que, sea una solución u otra, siempre hay que mirar la viabilidad", ha puntualizado.
El presidente del Popular, según informa Europa Press, ha remarcado que la entidad tiene provisionada una parte "muy considerable" de su exposición en la compañía y ha recordado que lo que se está produciendo en este caso es que "una de las partes pretende descargar toda la presión mediática sobre los bancos". "Como los bancos han hecho provisiones, que las pierdan. No estamos de acuerdo. Nuestra visión es que la compañía es viable y los esfuerzos hay que repartirlos de una manera más equilibrada", ha sentenciado.
Además, ha hecho hincapié en que si lo que se persigue dando publicidad a la situación de las conversaciones es "poner más presión" sobre la banca, las entidades financieras tienen un plan y alternativas al plan conocido. "Vamos a intentar preservar los intereses de Pescanova y los de los bancos, que no son los mismos que los que llevan a hacer propuestas. Supongo que llegaremos al final a un acuerdo", ha concluido.