
El pleno de Santiago de Compostela aborda este jueves la extensión del veto a nuevos pisos turísticos a toda la ciudad, una limitación que hasta ahora existía solo en el casco antiguo. El regidor local, Xosé Sánchez Bugallo, ha confiado en que los grupos municipales apoyen de forma unánime o al menos "mayoritariamente" esta medida y ha avanzado que se reforzarán los servicios propios de inspección, para actuar en colaboración con los del Gobierno gallego.
Sobre la cuestión concreta de los pisos turísticos, el regidor local ha apelado al "grado de efectividad" de esta medida, que dependerá también de la coordinación con la Xunta, que es la administración que tiene "la competencia en materia de instrucción de expedientes" y la "potestad sancionadora" en relación a las infracciones de la normativa turística.
Bugallo ha insistido, de este modo, en actuar mediante la colaboración con el Gobierno autonómico, y reforzando los servicios propios de inspección, sobre todo ante el volumen importante de alojamientos en situación ilegal o que presentan una irregularidad importante.
Según los datos que maneja el Gobierno local, existen aproximadamente unas 6.000 plazas desregularizadas, lo que superan a las 5.600 hoteleras que existen en la ciudad.