La Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) y la Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátrica (SEHOP) han defendido las donaciones de la Fundación Amancio Ortega porque "han venido a resolver un problema grave de la sanidad española, especialmente para el diagnóstico y el tratamiento del cáncer".
"Las donaciones constituyen una práctica habitual en los países occidentales más avanzados. Nos parece una temeridad que se realicen declaraciones plagadas de maximalismos y maniqueísmo sobre un tema tan serio como es la problemática de la atención oncológica en España, demostrando además un profundo desconocimiento del mismo", comentan los presidentes de ambas entidades, Carlos Ferrer Albiach (SEOR) y Ana Fernández-Teijeiro Álvarez (SEHOP), a través de un comunicado.
Las sociedades reconocen que "existe todavía un déficit de equipamientos (alrededor de 80 equipos de tratamiento)" para alcanzar las cifras recomendadas por las sociedades europeas de Oncología. Achacan esta situación al "cese tanto en la inversión como en la renovación de los equipos (entre ellos los dedicados al tratamiento del cáncer con radiación o aceleradores)" durante los años de crisis, lo que "supuso que el 40 por ciento del parque tecnológico quedara obsoleto (con más de 10-12 años de antigüedad)".
Así, justifican las aportaciones del dueño y fundador de Inditex, que ha donado en total 169 equipos de diagnóstico por la imagen (mamógrafos, TC, resonancias, etc.) y 158 equipos para el tratamiento del cáncer (101 aceleradores lineales, 8 equipos de braquiterapia, etc.).
En este punto, defienden que la Fundación "no ha intervenido en la elección de los equipos", sino que "ha dependido de las consejerías de Salud correspondientes y que, previa consulta a los profesionales implicados han decidido los dispositivos que eran necesarios en cada una de sus respectivas comunidades autónomas".
"El papel de la Fundación Amancio Ortega se ha limitado al abono de las cantidades comprometidas a las empresas suministradoras, una vez resueltos los concursos públicos y con la aceptación de los equipos por los profesionales implicados", concluyen.