Ramón Darío Rodríguez Franco,fue enviado a prisión. La titular del juzgado de Instrucción número 4 de A Coruña, en funciones de guardia, decretó su ingreso tras tomarle declaración como investigado por un delito de homicidio.
El autor confeso del crimen relató a la Policía que, tras discutir con su compañero por haber subido a Internet un vídeo sexual de él en el que se veían drogas, perdió «la cabeza». «No soy un asesino», remarcó.
Fue el propio agresor el que alertó a la Policía de haber matado a su compañero de piso, Alejandro Vilorio, de 46 años. Además del desencuentro por la publicación del vídeo, aseguró que también tenía problemas por el impago del alquiler de la habitación