Funcionarios del centro penitenciario de Teixeiro (A Coruña) se han concentrado a las puertas de la cárcel este jueves para reclamar que se refuercen las medidas de seguridad y expresar su apoyo a los tres empleados agredidos por un interno el pasado miércoles.
Tres funcionarios de la prisión resultaron heridos de diversa consideración luego de ser agredidos por un interno de 24 años del módulo 13 de Teixeiro. Según un comunicado de la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias, dos de ellos tuvieron que ser evacuados en ambulancia tras la agresión.
Los trabajadores públicos recuerdan que este episodio ha tenido lugar en la misma zona en la que, en marzo de 2017, un preso hirió a seis funcionarios. Se trata del número 13, un módulo de primer grado que "tiene menos medidas de seguridad que el 15, donde se encuentran los reclusos más violentos".
Así, apuntan que "generalmente" los internos que ocupan este módulo lo hacen "como paso previo" a recuperar el segundo grado --régimen ordinario de vida-- debido a una mejoría en su comportamiento. No obstante, aseguran que los funcionarios "habían advertido que no se daban tales circunstancias" y que "era cuestión de tiempo que se produjese un incidente de gravedad como en 2017".
CRÍTICAS A GRANDE-MARLASKA
A continuación, en su comunicado, Acaip señala que "este incidente" demuestra "lo poco acertada" que ha sido la "primera medida estrella" adoptada por el ministerio del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para Instituciones Penitenciarias "en la que se restringen las medidas para controlar este tipo de internos violentos".
Además, muestran su "preocupación" por el hecho de que el interno que provocó el incidente --"español pero de religión musulmana y origen magrebí"-- haya convivido en dicho módulo "con los tres detenidos en Teixeiro en una operación de la Audiencia Nacional para desmantelar una red de presos islamistas que pretendían abrir un frente de lucha en el interior de las cárceles, atacando a sus trabajadores".
Así las cosas, los funcionarios reclaman que este preso sea trasladado a otro centro y que se adopten medidas para evitar agresiones a los trabajadores de Instituciones Penitenciarias.