Del acoso sexual, el cohecho y el tráfico de influencias, que una mujer atribuye al presidente de la Diputación de Ourense, José Manuel Baltar, pasó este jueves el abogado de su padre, José Luis Baltar, a una amenaza expresa de acciones penales por extorsión contra la misma mujer.
El progenitor, que era presidente de la Diputación cuando el hijo hizo la supuesta oferta de un puesto de trabajo a Teresa F. C. a cambio de sexo, no solo negó la existencia de trato alguno, ni intercesión, ni compromiso, sino que dijo haberse sentido acosado y presionado por esta mujer hasta el intento de chantaje.
Afirmó José Luis Baltar que la mujer que acusa a su hijo lo llamaba a casa de forma tan insistente que llegó a decirle, con ánimo de que lo dejara en paz, que él era un hombre casado y que a su esposa no le gustaban nada esas llamadas.
Baltar, que contestó a las preguntas del fiscal, de su abogado, del letrado de su hijo y de la instructora, aseguró que alguna de las grabaciones aportadas por la denunciante estaba manipulada. En la última conversación, en el mes de septiembre del 2015, poco antes de que la mujer acudiera primero al fiscal y después al juzgado de guardia, es el propio Baltar quien pone fin al diálogo con un "te mando a la mierda" después de que ella, supuestamente, le hiciera una amenaza en el sentido de que si no apuraba las gestiones para obtener un puesto de trabajo, haría "lo que tenga que hacer" y lo denunciaría.
José Luis Baltar no hizo declaración ni a la entrada ni a la salida del edificio judicial. Fue su abogado, Luis Romero, quien censuró el "burdo plan" de la denunciante y su proceder, grabando conversaciones con dudoso móvil y posterior afán de chantaje.
El abogado de Democracia Ourensana personado como acusación popular, Miguel Caride, valoró como contundente la declaración de Baltar Pumar, pero "de ahí a que yo esté convencido ya es otra cosa". Lamentó que la "repercusión social" no sea otra, pues, añadió, "hace unos días hubo unas elecciones y todos sabemos lo que ha pasado".