Sin resolver los problemas que tiene en la Comunidad gallega, Ciudadanos se ve obligado a buscar una alternativa de cara a las elecciones autonómica. A diferencia del País Vasco, donde su portavoz, Nicolás de Miguel, será el candidato de la formación naranja a los comicios del 25 de septiembre, en Galicia el aspirante a la Xunta está aún por decidir si bien el partido apuesta por que sea un independiente.
Así lo han confirmado fuentes de la dirección de C's después de que el viernes se anunciara el adelanto de los comicios autonómicos de Euskadi y este lunes se comunicara en Galicia. Unas elecciones en las que Ciudadanos destinará unos 300.000 euros para cada una de las convocatorias, con la esperanza de entrar holgadamente en los parlamentos autonómicos. De acuerdo con los resultados de las últimas generales, Ciudadanos ha ido perdiendo fuelle en los dos territorios: en Galicia obtuvo 133.938 votos (un 8,63 %) frente a los 148.852 apoyos que logró el 20D.
En el País Vasco logró 40.326 votos (3,51 %), casi diez mil menos que en diciembre (50.268 y un 4,11 % de la representación). Nicolás de Miguel, exdirigente de UPyD en Guipúzcoa, tendrá que concurrir aún a primarias para su elección, de acuerdo con los Estatutos del partido. Sin embargo, no se celebrarán elecciones internas para elegir a los números uno de las tres provincias vascas porque no llegan a los 150 afiliados.
En Galicia, un territorio problemático para Ciudadanos, la formación de Albert Rivera quiere que sea un independiente el que aspire a la Xunta. Aún colean problemas como el de la agrupación de Coruña, a raíz de la dimisión en bloque de cinco miembros de su directiva antes de las elecciones generales del 26 de junio por el nombramiento “a dedo” -dijeron- de José Canedo, como número uno de la lista por esa circunscripción en sustitución de Antonio Rodríguez, que había obtenido acta en diciembre.
Era el único caso de los dieciséis cambios que hubo en los encabezamientos de las candidaturas de Ciudadanos que quería repetir, ya que el resto se produjeron por bajas, renuncias o debido a candidatos que ya no están en el partido, según explicó C's en su momento.
También en Lugo ha habido problemas después de que el subdelegado territorial de esta provincia, Juan Manuel Varela, pusiera su cargo a disposición del partido acusando a la dirección nacional de ejercer un poder “absolutista” y sin dejar margen de autonomía a los territorios.
Por otro lado, Ciudadanos se ha visto obligada a retrasar de nuevo la fecha de su asamblea general, que se atrasó ya a octubre tras la convocatoria del 26-.J y que ahora vuelve a aplazarse, probablemente a noviembre, por la cita electoral en Euskadi y Galicia. Una asamblea, han señalado las fuentes, en la que redefinirán el ideario de la formación, poniendo el acento en el centro ideológico y europeísta de Ciudadanos.