Galicia perdió 12.269 habitantes el pasado año al incrementarse las defunciones un 5,9 por ciento y continuar a la baja el número de nacimientos. En 2015 el número de alumbramientos se situó en los 19.412, la cifra más baja de los últimos trece años. Fueron 218 partos menos que el año anterior. Por el contrario, los fallecimientos subieron hasta los 31.681.
La comunidad gallega fue la autonomía española con el peor saldo vegetativo (la diferencia entre nacimientos y defunciones). Diez regiones aumentaron población y las otras siete la ganaron. Tras Galicia, Castilla y León ocupa el segundo puesto con una pérdida de habitantes de 11.883.
La caída de la natalidad afecta, sin embargo, a toda España. Y de hecho, Galicia fue la autonomía, detrás de Baleares, donde menos bajó el número de alumbramientos (-1,1 por ciento). A la cabeza con la mayor reducción se sitúan Cantabria, que disminuyó los nacimientos un 4,3 por ciento y La Rioja (3,5 por ciento).