La Audiencia de Pontevedra acaba de acordar el archivo del caso Sonia Iglesias. La decisión supone el rechazo de los recursos tanto del fiscal jefe de Pontevedra, como de la familia de la desaparecida. La acusación pretendía que Julio Ararújo, expareja de Sonia Iglesias, se sometiera al conocido como "test de la verdad", toda vez que las líneas de investigación se habían estancado.
La juez instructora del caso, del Juzgado de Violencia contra la Mujer, era partidaria de archivar el caso temporalmente, al entender que el material disponible sobre la investigación abocaba a "un fracaso de la pretensión penal". Sin embargo, tanto la familia de la desaparecida el 18 de agosto del 2010, como la Fiscalía consideraban que el test de la verdad podría arrojar nuevos caminos para la investigación. Sin embargo, que la prueba pueda vulnerar los derechos fundamentales de Araújo parece haber pesado más.