Galicia destinará la mayor parte de los 883,4 millones de euros que, en términos de ayuda comunitaria, contempla el Programa Operativo Feder 2014-2020 a afrontar la reorientación del modelo económico actual hacia un nuevo paradigma asentado en el "crecimiento inteligente, sostenible e integrador. Así, serán protagonistas el I+D+i, las TIC y su aplicación a las pequeñas y medianas empresas (pymes).
Los deberes, que ha asumido el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, en su intervención, los ha puesto la directora de Crecimiento Inteligente y Sostenible y Sur de Europa de la Dirección General de Política Regional y Urbana de la Comisión Europea (CE), Charlina Vitcheva, que acudió a la presentación de este programa en Santiago, donde instó a lograr un modelo de "menos cemento y más conocimiento".
Vitcheva ha felicitado a Galicia por el aprovechamiento de los fondos europeos que le ha permitido pasar del grupo de las regiones europeas "menos desarrolladas a las más desarrolladas", y ha incidido en el desarrollo de las infraestructuras.
Dicho esto, ha advertido que ha llegado el momento de cambiar de estrategia económica y pasar a una nueva basada "en el conocimiento y en empleos de más calidad". También ha incidido en que es preciso orientar los recursos hacia la consecución de "resultados" con el objetivo de sacar "el máximo partido de cada euro invertido".
Al respecto, ha celebrado la planificación de "prioridades" que ha plasmado la Xunta en el programa operativo de inversión de los Feder, así como otras iniciativas acometidas como los 'préstamos Jeremie'. Del mismo modo, ha confiado en el compromiso de Galicia para cumplir con el reto de reorientar el modelo de crecimiento y sacar "el máximo partido" de los recursos europeos.
"Mejorar la competitividad"
En un acto al que asistieron numerosas autoridades, entre ellas varios conselleiros como los de Facenda, Valeriano Martínez, y Economía, Francisco Conde, así como la secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos, Marta Fernández Currás, el presidente ha recordado que la comunidad gallega "no es la misma" que cuando entró en la UE.
"Y si hace unas décadas nuestro principal reto era superar el aislamiento de España y de Europa, hoy tenemos otras necesidades, otros objetivos y otras posibilidades", ha proclamado, para concluir que el "gran desafío" de Galicia es ahora "mejorar la competitividad".
A este objetivo irán destinados la mayoría de los fondos Feder. De hecho, Feijóo ha señalado que siete de cada diez euros se repartirán entre los cuatros ejes que sostienen la apuesta económica en la que la Xunta trabaja dentro del Plan Estratégico y que concentra también la Estrategia de Especialización Inteligente 2014-2020.
En concreto, 142 millones de euros se destinarán al impulso de la I+D+i y al desarrollo tecnológico, con el principal objetivo de aumentar en seis puntos el gasto de las empresas en innovación, pasando del 46 al 58 por ciento.
Asimismo, alrededor de 140 millones tendrán como fin "potenciar y mejorar" la calidad de las tecnologías de la comunicación, completando el proceso de modernización de la Administración y de los servicios públicos, así como el conocimiento digital de los gallegos. Para "mejorar la competitividad" de las pymes se destinarán 143 millones, contribuyendo sobre todo a "aumentar el tamaño" de las que ya existen, pero también a crear otras nuevas.
Completar tareas iniciadas
Otros 153 millones tendrán como objetivo insistir en la consolidación de una economía respetuosa con el medio ambiente, con una apuesta mayor por el uso de las energías renovables, el fomento de la movilidad sostenible, o por la reducción de emisiones de gases efecto invernadero en ocho puntos.
En cuanto la inversión restante -algo más del 30 por ciento- tendrá como destino, en palabras de Feijóo, "completar algunas de las tareas iniciadas en el periodo anterior" como el saneamiento de las rías y el fomento del sector turístico.
Para Feijóo, quien ha destacado que Galicia es una de las primeras comunidades en haber aprobado este programa, la concentración temática es "una de las principales fortalezas" del mismo. "No es un programa improvisado, sino que responde a las necesidades del presente y se marca retos de futuro para facilitar el camino, en vez de comprometer, a las próximas generaciones", ha aseverado.