Los transportistas de mercancías por carretera han propuesto al Ministerio de Fomento "flexibilizar" el descuento del 50% que les ofrecen para que circulen por autopistas en vez de por las carreteras, de forma que la rebaja oscile en función de factores como el tramo de vía, la franja horaria o el momento del año.
Esta es una de las medidas que los camioneros incluirán en la contrapuesta que Fomento les ha invitado a presentar a su iniciativa de obligar a los camiones de mayor tamaño por las vías de pago en vez de por las carreteras en los trazados en que exista esta alternativa.
Los transportistas remitirán su propuesta en abril, después de la Semana Santa, según acordaron en la reunión que el Comité Nacional del Transporte mantuvo en la mañana de este lunes con la secretaria general de Transportes, Carmen Librero, y el director general de Transporte Terrestre, Joaquín del Moral.
En el encuentro, los altos cargos de Fomento reiteraron al sector que su plan para desviar camiones a las autopistas de peaje no se pondrá en marcha sin un acuerdo previo con el sector.
Así, emplazaron a los transportistas a presentar sus propuestas sobre estas medidas con el fin de tratar de encontrar un punto de acuerdo, informaron a Europa Press en fuentes de la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM).
Según adelantaron dichas fuentes, en su propuesta, el sector insistirá en que la medida no sea obligatoria y planteará "flexibilizar" la bonificación del 50% del peaje que Fomento ofrece a los camioneros que se desvíen a la autopista con el fin de adecuarla a distintas circunstancias y factores.
Más atractivo
En opinión de los transportistas, el descuento puede ser más atractivo siendo mayor para algunos tramos e inferior en otros. Asimismo, estiman que se debería tener en cuenta factores de intensidad de tráfico como son las distintas franjas horarias y las diferentes épocas del año, como los periodos de vacaciones o los meses de invierno, con peores condiciones meteorológicas en las carreteras.
Los camioneros insisten en que, pese a su rechazo al carácter obligatorio, la medida de Fomento puede ser positiva por su contribución a optimizar la red de infraestructuras y mejorar la seguridad vial.
Los tramos de autopistas por los que se propone obligar a circular a los grandes camiones suman una longitud de 1.360 kilómetros de vías de pago, la mitad de los 2.500 kilómetros que actualmente suma la red de autopistas. El 'mapa' de tramos incluye distintos trazados de las autopistas AP-6, AP-61, AP-51, AP-4, AP-2, AP-7, AP-2, AP-1, AP-9, AP-68, AP-53 y AP-66. Entre ellas no figura ninguna de las vías de pago que actualmente están en quiebra.