El portavoz del gobierno local de Coruña, Julio Flores, ha reclamado al Ministerio de Defensa que "despeje la incertidumbre" sobre la adjudicación de la fábrica de armas "y el futuro laboral de los 61 trabajadores", ha señalado sobre los exempleados que, tras su despido, han mantenido las protestas en demanda de una salida industrial.
Tras una reunión con representantes del antiguo comité de empresa, en el Consistorio coruñés, Flores ha reiterado el "apoyo" del gobierno local a la plantilla. "Desde el minuto uno hemos hecho todo lo que estaba en nuestras manos", ha sentenciado.
Por otra parte, sobre la adjudicación provisional de la gestión a Hércules de Armamento y, ante las críticas que esta decisión ha suscitado entre los extrabajadores, Flores ha precisado que "una cosa es la obligación legal que puede tener un proyecto y otra la social".
"Si quiere entrar con buen pie en la fábrica de armas debería reconocer el esfuerzo de los 61 trabajadores", ha dicho Flores en caso de que se confirme la adjudicación definitiva a esta empresa.
"Presión" de la Xunta
Por su parte, el presidente del antiguo comité de empresa, Roberto Teijido, ha reiterado que "no tiene nada que ver" la actividad de Hércules de Armamento "con la de la futura fábrica".
"Las empresas no tienen actividad o las que la tuvieron tienen pérdidas", ha señalado al precisar que, entre ellas, hay una de "promociones inmobiliarias y un centro de uñas". "Esto no es serio, es un auténtico escándalo", ha indicado Teijido, quien ha pedido a la Xunta que "presione hacia arriba", ha añadido en alusión al Ejecutivo central.