Este fin de semana invernal nos deja un tiempo más propio de enero y febrero, con lluvias contundentes que, en algunas zonas necesitadas de agua, serán beneficiosas para recortar algo el déficit.
En la Península y Baleares se prevé que continúe la influencia de un amplio y profundo sistema de bajas presiones, con varios frentes que dejarán cielos nubosos o cubiertos, así como precipitaciones generalizadas y abundantes. Pueden ser localmente fuertes o persistentes en el oeste de Galicia, Pirineo, Estrecho y zonas de Andalucía, sin descartar montañas del centro y pueden ocasionalmente ir acompañados de tormentas y de granizo. Serán ocasionales y menos abundantes en el Cantábrico y Levante.
Serán en forma de nieve en montañas de la mitad norte y del sudeste, con probables acumulaciones de 10-20 cm y son probables también, en forma más débil, en otras zonas de Galicia, meseta Norte y nordeste de la meseta Sur. En la mitad sudeste y Baleares tiende a poco nuboso al final.
Las temperaturas máximas aumentan en los archipiélagos y Melilla, con tendencia a descender en el resto. Las mínimas descienden el norte y aumentan en el sur y Canarias, sin grandes cambios en el resto. Se producirán heladas débiles en montaña y zonas próximas de la mitad norte peninsular y del sudeste, algo más intensas en Pirineos.
El domingo mantendrá la tónica y no será hasta el lunes que se inicie una progresiva estabilización por el oeste peninsular, aunque todavía persistirán restos de inestabilidad, sobre todo por el norte y el este, que dejarán cielos nubosos en el tercio norte y precipitaciones, débiles en general, que afectarán al extremo norte, donde se espera que sean persistentes, y a los sistemas montañosos del norte y el este peninsulares. Es probable que sean en forma de nieve en zonas de montaña del norte peninsular. En el área mediterránea esperamos únicamente algunos intervalos de nubes mientras en el resto de la Península habrá nubosidad baja y no se descarta algún chubasco disperso.
Las temperaturas tienden a descender en Canarias, y ascienden ligeramente en el resto. Continuarán las heladas débiles en montaña y zonas próximas de la mitad norte peninsular y del sudeste y es probable que sean más intensas en Pirineos.
El martes será un día de transición marcado por una tendencia al alza de las temperaturas para dar paso los días siguientes al paso de varios frentes y líneas de inestabilidad postfrontales asociados a una borrasca atlántica, aunque existe incertidumbre acerca de las áreas que se verán más afectadas.
Es probable que en el tercio occidental peninsular se produzcan las precipitaciones más abundantes, especialmente en el oeste de Galicia. Cuanto más al oeste disminuirá la probabilidad de las precipitaciones. Son muy poco probables en el área mediterránea y Baleares.
Predominarán los ascensos térmicos, con heladas que irán perdiendo extensión e intensidad, y los vientos con un predominio de las componentes sur y oeste, irá ganando intensidad conforme avanzan las jornadas. Poniente al principio para rolar después a levante en el Estrecho y Alborán. Probables intervalos de fuerte en el litoral de Galicia.
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