La dirigente de UPyD consideró que las declaraciones de monseñor Uriarte en las que abogaba por dialogar con ETA de vergonzosas. "Me produce asco la impunidad con la que equipara las víctimas con los victimarios. Considera el terrorismo un problema político como si lo dijera cualquier terrorista, desde el púlpito, bendecido por Dios. Es una humillación para las víctimas y para las personas normales. Y es el obispo. Hace más daño ese discurso que si lo dijera Otegi, porque habla en nombre del bien. Es indignante y deplorable". "La jerarquía vasca se ha adaptado al ambiente, viven sin escoltas y nunca han tenido problemas. Se adaptan al ambiente. Eso es complicidad".
Sobre los últimos guiños políticos de Patxi López al PNV, Rosa Díez quiere creer que el acuerdo PSE-PP es estable, aunque tiene sus dudas. "Espero que la cabra no esté tirando al monte. Me da miedo que la cabra vuelva al monte". No obstante, mostró su preocupación porque el único discurso alabado por Zapatero este miércoles en el Congreso haya sido el de Erkoreka y la retirada de la moción de censura en la Diputación de Álava.
La diputada de UPyD también fue muy crítica con la política económica del Gobierno y el discurso del presidente del Gobierno, al que ha acusado de hacer "política subprime". "Zapatero se comporta como un adolescente" que espera que otros arregle las cosas, "Merkel, Obama, Sarkozy, eso es una irresponsabilidad. Y Zapatero, mientras, sonriendo y diciendo lindezas".
Considera que el presidente se niega a aceptar que hay que gobernar. "En la primera legislatura se dedicó al despilfarro y después negó la crisis y no tomó decisiones ni medidas, ha estado viviendo por encima de las posibilidades y eso es política basura". Rosa Díez cree que en España hay que afrontar una reforma fiscal globalmente y una reforma laboral para mejorar el empleo y el modelo productivo. "Ha pasado directamente de decir que no hay crisis a decir que ya estamos saliendo de ella. Sería pare reírse si no fuera un drama".
En cuanto al sistema educativo Rosa Díez se mostró a favor de abordar reformas estructurales y a fondo que garantice la calidad, y para ello, es necesario que el Estado recupere las competencias en Educación. "Es la única manera de que haya un modelo educativo".
Negó que haya ninguna crisis interna en UPyD, más bien al contrario. "No tenemos fuerza para responder a las expectativas de la gente", señaló.