El voraz incendio iniciado en la mañana de este domingo en el Polígono de O Ceao, en Lugo, ha quedado controlado pasado el mediodía pero todavía sigue activo en una nave industrial de neumáticos. Las llamas comenzaron en las instalaciones de la empresa de pinturas Castro Parga, para posteriormente trasladarse a otras cuatro parcelas.
Según informa el 112, la magnitud del fuego obligó a vaciar de combustible una gasolinera de la zona de modo preventivo y a que la Xunta activase el Plan Territorial de Emerxencias de Galicia (Platerga) en su nivel 1, lo que implicó el desplazamiento de diferentes recursos del ámbito local y supralocal.
Hasta el punto se trasladaron la alcaldesa de la ciudad, Lara Méndez; la subdelegada del Gobierno en Lugo, Isabel Rodríguez; el delegado territorial de la Xunta, Javier Arias; y el director xeral de Emerxencias e Interior, Santiago Villanueva, quien ha confirmado que, aunque el viento ha facilitado el control del fuego, todavía sigue activo en una nave de almacenamiento de neumáticos.
En la extinción de las llamas trabajan los bomberos de Lugo y de Vilalba y varias motobombas del personal contra incendios forestales de Monterroso, Becerreá y Chantada. Además, se desplazó hasta el lugar un grupo de apoyo logístico de la Axencia Galega de Emerxencias (Axega) con un camión nodriza para abastecer de agua al resto de efectivos, así como miembros de Protección Civil, de la Policía Local y de la Nacional.
A pesar de que por el momento no se tiene constancia de daños personales, efectivos del 061-Urxencias Sanitarias de Galicia permanecen en el punto de modo preventivo.
Tal y como ha detallado el 112 Galicia, fue la Policía Nacional la que alertó sobre las 6,40 horas de que se había registrado un fuego en el interior de la nave de pintura de Castro Parga, que ha quedado totalmente calcinada.
Posteriormente, según ha explicado el director xeral de Emerxencias e Interior de la Xunta, el incendio "pasó a otras naves" de almacenamiento de neumáticos --donde las llamas siguen activas--, recambios de automóviles, rotativas de un periódico y a otras contiguas.
Villanueva ha incidido en que, en estos momentos, "todos los medios están centrados en la extinción y en evitar que se propague" el fuego, por lo que estima que "quedan horas de trabajo de refresco y aporte de agua" para enfriar la zona.
Preguntado sobre el origen de las llamas, el director xeral lo ha situado en el área de almacenaje de Castro Parga, pero el análisis de las causas lo estudiará la Policía Científica "una vez concluyan" las labores. Entonces, también habrá "que evaluar la afectación de las estructuras" de las naves como consecuencia del fuego y del calor acumulado.
La gran columna de humo negro que emana de O Ceao es visible desde la ciudad Lugo y a varios kilómetros de distancia. Precisamente, esto impidió poder atacar al fuego con medios aéreos, por lo que se tuvo que hacer desde tierra.
Uno de los "momentos críticos" del operativo, según Villanueva, ha sido el momento en el que se temía que la nube tóxica se desplazase hacia el centro de la urbe y afectase a la calidad del aire. Sin embargo, ha dicho que "en estos momentos" no hay peligro de que ocurra gracias a que el viento sopla en dirección contraria.
El director xeral de Emerxencias e Interior ha aprovechado para "agradecer el trabajo de todos los implicados" en las labores de extinción, lo que incluye a "empresas privadas" que ayudaron con el aporte de agua