
El sindicato ANPE ha constatado una tendencia al alza de expedientes disciplinarios en etapas como primaria y el primer ciclo de secundaria. Es por ello que la entidad insta a los docentes a denunciar estos casos y a no permitir abusos tanto por parte del alumnado como de los padres que acuden a amenazar y a cuestionar la autoridad del profesor.
El sindicato ha presentado este miércoles los datos del Defensor del Profesor. En este acto y a falta de conocerse los últimos datos de expedientes disciplinarios en Galicia, han trasladado su preocupación por las cifras dadas a conocer por el informe de apertura del Año Judicial, que refleja que se "han duplicado" los menores juzgados (616) y las sentencias condenatorias (736) en 2018 respecto al periodo 2014-2015.
Asimismo, los casos en los que se ha dictado fallo sin conformidad "aumentaron vertiginosamente", lo que evidencia que los menores son cada vez menos conscientes de las consecuencias de sus acciones o que actúan con mayor impunidad.
"El aula es un reflejo de lo que se da en la sociedad", han considerado y a su vez advierten del repunte del 18 por ciento de delitos con menores relacionados con violencia en el ámbito familiar y el aumento de otros de índole sexual.
Esta realidad se traduce en el aula sobre todo en las etapas de secundaria y de FP Básica, esta última con clases "prácticamente incontrolables" y en las que es "imposible impartir docencia". La preocupación del sindicato radica en la cada vez mayor conflictividad en la etapa de primaria, y que el profesorado se siente "desprotegido" y no sabe actuar "ante este tipo de situaciones".
Díaz ha instado, así, a que los docentes "tienen que denunciar" puesto que "no se puede permitir" este tipo de conductas en el aula.
El Defensor del Profesor ha atendido a 136 profesionales durante el pasado curso. La mayoría de los casos denunciados han sido faltas de respeto y problemas para dar clase, aunque ANPE ha detectado un repunte en alertas relacionadas por el uso indebido de las nuevas tecnologías de alumnos frente a otros compañeros o contra docentes, además de casos de padres que cuestionan su trabajo y autoridad en el aula.
En este sentido, ha apostado por "la vía formativa en materia de resolución de conflictos", y en "hacer una reflexión" sobre las nuevas tecnologías. También ha insistido en el papel "fundamental" de la mediación escolar y de los protocolos contra el acoso escolar, además de las escuelas de padres y madres.
