El conselleiro de Economía, Francisco Conde, ha comunicado al comité de empresa y a los alcaldes de la zona que recibió la solicitud formal de segregación por parte de Ferroatlántica, con el objetivo de poder vender las centrales hidroeléctricas de Cee y Dumbría (Coruña).
Así las cosas, fuentes de la consellería consultadas por Europa Press indican que ahora toca evaluar la documentación, dirigida al organismo Augas de Galicia e "ingente" según la propia empresa, que este jueves ha emitido un comunicado de prensa subrayando que "solo" con el levantamiento de la prohibición de segregar las actividades de ferroaleación y energía eléctrica podrá ejecutar el plan que, asegura, garantiza su viabilidad.
Las mismas fuentes han evitado dar un plazo en el cual la administración tendrá respuesta a esta petición, y subrayan que seguirá el proceso habitual en este tipo de trámites.
Por su parte, el presidente del comité de empresa, Santiago Paz, ha asegurado, también en declaraciones a Europa Press, que la noticia "no cayó de sorpresa" en la Costa da Morte y ha indicado que los trabajadores celebrarán este viernes una reunión para analizar qué respuesta dan a este nuevo paso.
El comité rechaza la venta y no se cree las palabras de Ferroatlántica cuando dice que el comprador de las centrales -el fondo canadiense Brookfield, según Paz- mantendrá el empleo.
Después de meses de manifestaciones
La solicitud formal de Ferroatlántica llega después de varios meses de polémica en los que los trabajadores de Cee y Dumbría se han manifestado, contrarios a la venta de las centrales.
Entre tanto, la firma anunció a la comisión nacional del mercado de valores (CNMV) que ya tenía comprador, y la oposición exigió al Gobierno gallego que no permitiese la operación, ante lo que el Ejecutivo siempre alegó que todavía no había recibido petición oficial.
Hace algo más de un mes, el 8 de abril, Ferroglobe informó de que sindicatos y dirección habían alcanzado un acuerdo para desarrollar el plan de inversiones para las empresas del grupo en España, pacto que el comité de empresa de Ferroatlántica en la Costa da Morte calificó de "ilegal". De hecho, a continuación, los delegados de UGT y CCOO del comité en Cee y Dumbría anunciaron su ruptura con sus organizaciones.