El alcalde del municipio lucense de Pantón, el popular José Luis Álvarez Blanco, asegura que el martes respaldó una moción sobre el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que presentó a pleno el BNG con el apoyo del PSOE porque se sintió "amenazado" e incluso temió por su "integridad física", pero insiste en que la propuesta ni es legal ni puede llevarse a cabo.
Los vecinos de Pantón están recibiendo en los últimos meses los recibos del IBI en los que se incluye la anualidad en curso y los cobros de otros cuatro años con carácter retroactivo. La medida se corresponde con la revisión catastral que ordenó el Estado a nivel general y con la actualización de los tipos de gravamen en los que el mínimo lo marca el Gobierno central y el resto cada ayuntamiento.
Ello ha causado las quejas enérgicas de más de un centenar de vecinos que la noche del martes acudieron a la sesión plenaria e increparon intensamente al regidor y a su equipo por las altas cuantías que reflejan los recibos que se envían desde la Diputación de Lugo.