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Oubiña trabajará con exdrogadictos en una ONG católica tras obtener el tercer grado

Un auto Vigilancia Penitenciaria permitirá al narcotraficante salir de prisión por el día, pero aún tiene que ratificarlo la Junta de Tratamiento.

Laureano Oubuiña Piñero, el histórico narcotraficante gallego, tendrá que esperar unos días tras obtener el tercer grado y no unas horas como se había adelantado este viernes para salir de prisión. El Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional la ha concedido el tercer grado penitenciario, por lo que solo tendrá que ir a prisión a dormir. Y durante el día, el otrora capo gallego del hachís, trabajará como voluntario en la delegación que la organización no gubernamental (ONG) San Francisco de Asís tiene en Madrid, según publica Faro de Vigo. Oubiña trabajará en el centro de acogida de inmigrantes y extoxicómanos que regenta esta organización religiosa, y atenderá a personas en situación de marginada, algunas de las cuales sufrieron adicción a las drogas.

El narco gallego se puso en contacto en su día con el director de esta asociación para solicitarle poder trabajar en ella, y é aceptó. Como sostiene el abogado de Oubiña, "un hombre no puede estar viviendo siempre en su pasado, y é ha pasado casi 20 años en la cárcel".

No obstante, fuentes oficiales de Instituciones Penitenciarias señalaron a última hora de la tarde de este jueves -señala el citado diario- que la concesión del tercer grado no será "cuestión de horas". El auto de la Audiencia Nacional tiene carácter ejecutivo, por lo que tiene que ser cumplido, pero antes la Junta de Tratamiento de la cárcel de Navalcarnero quiere reunirse para "estudiar" el expediente completo, y recurrir la decisión del juez, si lo consideran procedente.

Laureano Oubiña fue condenado hasta en cuatro ocasiones, dos de ellas por tráfico de hachís. Actualmente cumplía una pena de cuatro años y medio de cárcel por blanqueo de dinero procedente del narcotráfico en el penal madrileño de Navalcarnero. Estuvo en la cárcel de forma ininterrumpida entre el otoño de 2000 y julio de 2012, y después volvió a ingresar en febrero de 2014, a raíz de la sentencia por blanqueo.

Laureano Oubiña sí ha estado gozando periódicamente de permisos, pues está a tratamiento de dos cánceres. Su última salida de la cárcel fue a principios de este mes, y en esos días explicó que ha retomado su proyecto de escribir un libro autobiográfico.

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