En la batalla abierta este martes en la Conferencia de Presidentes a cuenta de la armonización fiscal entre las distintas comunidades autónomas, el titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, tiene su propia propuesta. Cada autonomía puede hacer lo que quiera con sus impuestos, pero con la condición de que cumpla con el objetivo de déficit y no necesite recurrir a fondos adicionales del Estado para tener liquidez en sus cuentas. Si una región es solvente, pues puede tener una política fiscal propia y diferenciada y bajar los impuestos a su criterio.
En una entrevista a Onda Cero, Feijóo aprovechó además para responder a la presidenta andaluza, Susana Díaz, defensora de la armonización fiscal entre todas las comunidades autónomas. Lo que le dijo fue que ella podría armonizar la jornada laboral, ahora que Andalucía ha vuelto a rebajar la de sus funcionarios a 35 horas semanales, inferior al horario fijado en el resto de España. "Si hablamos de armonización de impuestos se puede hablar de armonización de muchas otras cosas", comentó.
Feijóo replicó de esta forma a la petición que hicieron en la Conferencia de Presidentes Díaz y otros mandatarios socialistas, que plantearon que los expertos que van a estudiar la financiación autonómicaincluyan también el "esfuerzo fiscal" que hace cada ciudadano en función de la comunidad autónoma donde vive.
A su modo de ver, eso "ya está estudiado" y, aunque ha admitido que no es razonable negarse a que se estudie ese asunto, "cada comunidad autónoma tiene sus competencias y las va a ejercer".
De hecho, ha defendido que las comunidades autónomas que cumplan el objetivo de déficit y no necesiten dinero del Gobierno central puedan hacer su política propia. En cambio, cree que si una comunidad pretende bajar impuestos con cargo al déficit público y luego pedir dinero al Gobierno central "lo lógico es que estas cosas se hablen" porque lo acaban pagando ciudadanos de otras comunidades.
Según ha explicado, en el fondo de la discusión está el Impuesto de Patrimonio, "muy alto" en Cataluña y Andalucía, "más bajo que en otros sitios" en Galicia e inexistente en Madrid. Así, ha admitido que esto puede producir "deslocalización ficticia de domicilios" pero ha añadido que si se habla de armonizar impuestos "se puede hablar de armonizar muchas otras cosas".
Además, ha defendido que "no todas las comunidades autónomas gestionan con el mismo rigor" y eficacia, y que también, dentro de la misma comunidad, hay diferencias cuando cambia el signo del Gobierno.
Con todo, ha subrayado que el debate importante es cómo se paga la sanidad, la educación y la atención de la dependencia en el futuro modelo de financiación autonómica.
Por último, ha atribuido la ausencia del presidente catalán, Carles Puigdemont, de la Conferencia de Presidentes de este martes a que probablemente "su planteamiento es cerrar bilateralmente su dinero con el Gobierno central", pero ha remarcado que "quedó claro que no es posible, que el sistema es multilateral".