El hombre detenido en relación con el asesinato en Vigo de la joven de 25 años Ana María Enjamio Carrillo, César Adrio, ha llegado a primera hora de este miércoles a la sede de los juzgados de la ciudad olívica en un furgón del Cuerpo Nacional de Policía. Como estaba previsto, el hombre ha llegado poco antes de las 9:00 horas a la sede judicial, donde pasará a disposición del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo, que sigue la causa por el asesinato de la joven, actuaciones que han sido declaradas secretas.
Transcurrido el plazo de 72 horas máximo de arresto -se cumple este miércoles a las once y media de la mañana-, César Adrio, el detenido por la presunta autoría del crimen de Ana María Enjamio, comparece esta mañana ante la titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo, que deberá decidir si lo envía o no a prisión provisional.
El ingeniero, compañero de trabajo de la víctima con la que tuvo una relación, permanecía desde el domingo en comisaría, donde ha guardado silencio y se acogió a su derecho a no declarar. Sólo salió de allí, bajo custodia policial, para asistir a un registro en la vivienda donde residía en Candeán.
La Policía Nacional trabajo sin descanso, desde que la madrugada del sábado se halló el cuerpo de la víctima en el portal de su edificio, para recabar pruebas que entregar a la magistrada, que ha decretado el secreto de las actuaciones. Además de la búsqueda del arma homicida y el teléfono móvil de la fallecida, que permanecen desaparecidos, las pesquisas se centraron también en los teléfonos móviles y concretamente en la triangulación de los terminales de arrestado y víctima para tratar de despejar incógnitas.
Antes de adquirir la condición de arrestado,el sospechoso manifestó que tras la cena de empresa navideña en la que coincidió con Ana María se fue a su casa, donde después se duchó y acudió a Vilagarcía a recoger a sus hijos. El detenido está separado.