El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha reivindicado la "estabilidad" política en Galicia, -tras obtener la mayoría absoluta en las últimas elecciones autonómicas-, como "un activo" cara a las negociaciones de la financiación autonómica, mientras que ha instado a "evitar" negociaciones bilaterales entre el Gobierno y una comunidad autónoma. El jefe del Ejecutivo autonómico reclama una financiación "pensada en las personas y no en los territorios". Además, el presidente de la Xunta apela a "acuerdos" en el Parlamento gallego para trasladar "la voz" de la autonomía a la Conferencia de Presidentes.
"Sería un error pensar que hay dos centros de decisión", ha señalado en alusión a Madrid y Barcelona en el marco de una conferencia sobre ‘La estabilidad institucional: Un valor económico y social’, celebrado en el Museo Santiago Rey-Fernández Latorre y organizada por el Banco Santander y La Voz de Galicia.
En su intervención, ha argumentado, de cara a estas negociaciones, que "lo que no puede ocurrir es que el alumno que cumple -en referencia al cumplimiento del objetivo del déficit en Galicia- tenga discriminación por cumplir", ha sentenciado. De cara a esta negociación, ha vuelto a defender la "necesidad" de hablar de la "viabilidad" del sistema sanitario.
"No avanzaremos en la financiación de las comunidades autónomas, sino valoramos de forma separada la evolución del gasto sanitario", ha recalcado. Mientras, ha instado a la búsqueda de "acuerdos previos" en el Parlamento gallego para que "la voz" de Galicia se traslade en la Conferencia de Presidentes autonómicos convocada en enero.
Evitar el "bilateralismo"
Antes, en su conferencia, el titular del Ejecutivo gallego ha apelado a aprovechar la estabilidad "para impulsar acuerdos" y ha trasladado esta oferta a "los que quieran sumar". Con todo, ha dicho que, de no lograr estos acuerdos en el Parlamento gallego, el Ejecutivo "tiene que gobernar", ha sentenciado en alusión a algunas de sus propuestas cara este mandato y a su planteamiento en la negociación con el Gobierno central.
De estas negociaciones, no ha considerado "coherente" la ausencia de "dos presidentes autonómicos", en alusión a Cataluña y Euskadi, mientras que ha apelado a "evitar el bilateralismo" para no incurrir "en tratos privilegiados".
Además, ha recalcado que debe existir "una diferenciación entre el debate identitario y el financiero" y tener en cuenta que "no se financian territorios". "Se financian servicios", ha apostillado.
Por otra parte, el titular del Ejecutivo gallego ha vuelto a reivindicar la respuesta que Galicia tuvo en la crisis y que ha comparado lo que, a su juicio, fue el "engaño previo" del Gobierno socialista "negando la crisis" o la "huida" a la "aventura soberanista" en Cataluña.
Reforma laboral y pensiones
"Galicia ni negó la evidente crisis ni se escondió", ha expuesto en una intervención en el que se ha mostrado confiado en que esta autonomía logre en el segundo semestre de 2017 un Producto Interior Bruto (PIB) "igual al que teníamos en 2008". En materia económica, y a preguntas de los asistentes, ha defendido que no se modifique la reforma laboral.
Así, ha considerado que la economía española "va a funcionar si no la estropeamos", ha dicho al cuestionar que la oposición pueda tratar de buscar a través de enmiendas a la totalidad modificar determinadas iniciativas. Sobre las pensiones, ha advertido de que "no puede quebrar" este sistema, pero ha considerado necesario "buscar fórmulas" para garantizar su continuidad.
Preguntado si es partidario de hacer un plan de pensiones, ha afirmado que no encuentra "razón para decir que es malo" tener uno y, en particular, lo ha considerado "fundamental" para "afrontar las inseguridades" en el caso de la que renta disponible lo permita. También ha planteado valorar "la fiscalidad muy dura" de estos planes.