Las cuentas no le salen a Xulio Ferreiro, ni a Jorge Suárez y tampoco a Miguel Anxo Fernández Lores. Y por eso los alcaldes de Coruña, Ferrol y Pontevedra han llegado a verbalizar la posibilidad de vincular su continuidad en el cargo a que sus oposiciones les brinden el respaldo suficiente para aprobar los presupuestos del 2017, o de lo contrario les dejen sin bastón de mando si son capaces de elegir un recambio.
En Ourense, donde el Concello repite presupuestos desde el 2014, Xesús Vázquez ni ha empezado a hablar del diseño de los ingresos y gastos, y maniobra a golpe de modificaciones de crédito, según publica La Voz de Galicia. Y en Santiago, Martiño Noriega juega con la baza de una baja difícil de cubrir en el grupo socialista para garantizarse la aprobación de las cuentas con su voto de calidad, siempre que acabe sumando el apoyo del BNG, si la crisis de Pontevedra no acaba rompiendo puentes entre las mareas y los nacionalistas. Únicamente el Concello de Vigo comenzará el nuevo año con las cuentas aprobadas.
El gobierno municipal de Pontevedra ha el primero (este mismo lunes) en someterse en el pleno a la decisión de la oposición.
Está por ver si retira o no su propuesta presupuestaria, después de que la oposición se pusiese de acuerdo para modificarle varias partidas. Las últimas horas se han convertido en el consistorio pontevedrés en el escenario de debates jurídicos respecto a la validez de las enmiendas pactadas entre PP, PSOE Marea y Ciudadanos y si ese acuerdo impide o no legalmente que el alcalde presente una cuestión de confianza. La seguridad de que el dispar arco de la oposición imposibilitará el pacto para elegir a otro alcalde lleva al BNG pontevedrés a debatirse entre prorrogar los actuales presupuestos o hacer evidente que sus adversarios son incapaces de relevar a Lores.
Invitación de Ferreiro
"Que otros grupos busquen si hay una alternativa diferente", manifestó ya el alcalde coruñés, Xulio Ferreiro, que tiene por un lado una propuesta de apoyo del PP a cambio de condiciones inasumibles para Marea Atlántica y, por otra, una oferta del PSOE que conllevaría delegar parte de la estrategia de gobierno aceptando diseñar a medias las cuentas del 2017. Escaldado por una negociación imposible que llevó a junio la aprobación definitiva de los presupuestos de este año, con modificaciones pactadas entre PSOE y PP incluidas, Ferreiro es el primero que mienta la posibilidad de ligar su propuesta contable a que se vote su propia continuidad o a que la oposición presente un candidato alternativo. Esa posibilidad ha llegado a estar encima de la mesa del PSOE, pero hasta ahora no ha pasado de hipótesis.
Y si en Ourense el alcalde del PP gestiona con las cuentas que hizo el anterior alcalde del PSOE, en Ferrol la versión local de la marea que lidera Jorge Suárez vive, desde que accedió al cargo, con los presupuestos que en el 2015 aprobaron los populares. La atomización que sufre la corporación ferrolana, con cinco grupos municipales y el del PSOE además partido en dos, ha llevado a la formación del alcalde a decidir en asamblea jugarse el cargo en una cuestión de confianza.
La misma imposibilidad que tiene Suárez de lograr un acuerdo presupuestario la tienen sus rivales para pactar un candidato alternativo a la alcaldía. "Estoy legitimado por los trece votos de la investidura", reitera el regidor, que sin embargo aún no ha dado el paso de activar el cronómetro presentando su propuesta de presupuestos.