Una agente de la Policía Local de Pontevedra será suspendida de sus funciones durante quince días por abuso de atribuciones. Los hechos son merecedores, a juicio de la junta de gobierno local, de una falta grave.
Las circunstancias que dieron como resultado la sanción tuvieron lugar el pasado 2 de marzo, cuando la agente, estando fuera de servicio, estacionó su coche particular en una zona reservada para carga y descarga en la calle Pardo Bazán. El vehículo fue denunciado, por lo que requirió la presencia de la grúa municipal para su retirada al depósito. El vehículo ya había sido enganchado e iba en camino del depósito, cuando la agente, al percatarse de los hechos, llamó a los empleados de la empresa concesionaria para que detuvieran a la grúa que se llevaba su coche. Se da la circunstancia agravante de que entre las funciones que desempeña habitualmente la agente figura precisamente la de acompañar a la grúa municipal.
Los empleados atendieron la solicitud de la policía, detuvieron la grúa y «liberaron» el vehículo sin que la agente hiciera efectivo el pago de las tasas ni la correspondiente multa.
Ante estos hechos, el gobierno local abrió una investigación que derivó en la citada sanción de suspensión de funciones desde el 1 al 15 de diciembre, además del abono de las tasas. La agente reconoció los hechos.