Como el Titanic, el PSOE se hunde. Además del batacazo en las tres últimas citas con las urnas, los sondeos del 25-S nos ofrecen una lectura preocupante: la irrupción del populismo y el hundimiento del socialismo. Y éste es el único dato inquietante con vistas al futuro.
Dicen las encuestas que el PSOE es el gran perdedor. Pierde la hegemonía de la izquierda y los resultados son tan decepcionantes que suponen una mayor presión para adelantar la renovación de unpartido desnortado. Incluida la renuncia de Sánchez.
La lectura de los sondeos del 25-S confirma el crecimiento del PP, que obtendría su tercera mayoría absoluta, el ‘sorpasso’ de En Marea sobre el PSOE y un descalabro del BNG, que necesita una refundación.
Los datos de las encuestas son tan demoledores que el PSOE puede convertirse en una fuerza residual. Y la pregunta es si Sánchez, su coro de monaguillos de Ferraz y sus adelantados en provincias no se enteran o si lo hacen es para llevar al Partido Socialista hacia su destrucción.
En definitiva, análisis se pueden hacer muchos y lecturas más sobre las encuestas para el 25-S. Pero hay un hecho: estamos ante un hundimiento provocado del PSOE y de la irrupción como fuerza de referencia de la izquierda de una amalgama de partidos populistas. Y de esto son tan responsables Sánchez como los barones socialistas, que hablan mucho y hacen poco. Lo dicho, el PSOE, como el Titanic, se hunde.