Tras un mes de julio con casi total ausencia de lluvias y caracterizado por unas temperaturas más elevadas de lo habitual, el fuego hacía presencia este lunes, un verano más, y la zona sur de Galicia fue la más afectada, aunque los fuegos se extendieron por diferentes zonas de la geografía gallega. Algunos fueron controlados y otros permanecen activos. Tres incendios de grandes dimensiones ponen en jaque a la provincia de Pontevedra y han calcinado ya más de 850 hectáreas. A estos tres fuegos se ha sumado durante la tarde de este martes un cuarto en la provincia, en concreto en el concello de Soutomaior. Las llamas se encuentran cerca del castillo y Medio Rural ya ha enviado efectivos a la zona. De momento no hay estimación de superficie calcinada.
El clima seco, el intenso calor registrado en estos últimos días y el viento propició que las llamas se extendieran con rapidez en todos los casos e incluso llegaron a estar amenazados núcleos de población. Los tres fuegos registrados esta semana son ya algunos de los peores del verano.
Mondariz: 160 hectáreas
Es el más reciente de los incendios ocurridos en Galicia. La alerta saltó pasadas las 22:00 horas del lunes y se llegó a decretar alerta de grado 2 por la cercanía a las viviendas en los núcleos de población de Cumiar y A Coutada. La alarma ha sido desactivada esta mañana pasadas las 10:30 horas y poco después se dio el incendio por estabilizado.
El fuego afectó a las parroquias de Quimadelos, Meirol, Mouriscados y Vilasobroso. El regidor de Mondariz, Xoán Carlos Montes, criticó la falta de medios y efectivos. “Si se hubiese actuado antes no se llegaría a donde se llegó. Llamé a emergencias por ver si movilizaban a operativos de Vigo porque estaba cerca de las casas y me dijeron que no. Creo que hubo falta de coordinación”, apuntó Montes.
Este es uno de los primeros incendios grandes de la temporada en el área de Vigo. El último en registrarse fue el incendio de Arbo de la semana pasada, en el que ardieron unas 110 hectáreas y en el que también se temió por varios núcleos de viviendas.
La Xunta movilizó para el fuego originado en Queimadelos a un técnico, seis agentes, 18 brigadas, 16 motobombas y una pala.
Caldas de Reis: 290 hectáreas
Uno de los más graves registrados en la provincia fue el de Caldas de Reis, declarado este lunes poco antes de las 16:00 horas y que obligó a movilizar numerosos medios de extinción terrestres y aéreos. El fuego se originó en la parroquia de Saiar y también obligó a activar la alerta 2 por la proximidad con el núcleo de Castro de Agudín, que ha quedado desactivada pasadas las 12:30 horas de este martes, según recoge Europa Press.
Para las labores de control han sido movilizados tres técnicos, nueve agentes, 23 brigadas, 11 motobombas, dos palas, un tractor, 10 helicópteros y dos aviones.
Cotobade: 365 hectáreas
En Cotobade se inició este lunes un fuego que fue creciendo debido a las condiciones atmosféricas a lo largo de la tarde y llegó incluso a saltar a de municipio. La situación en la parroquia de Bora, en O Salgueiral, obligó a extremar la cautela porque las llamas llegaron a menos de cincuenta metros de las viviendas. A primera hora de la mañana la Xunta informaba de que el fuego, iniciado en la parroquia de Tenorio, se encontraba activo y que la alerta de nivel 2 se mantenía, debido a la cercanía con el lugar de Vilanova.
Las llamas en este caso arrancaron a las 17:20 horas del lunes y en su control trabajan hoy, según fuentes de Medio Rural 2 técnicos, 19 agentes, 24 brigadas, 10 motobombas, 6 palas, 15 helicópteros y tres aviones. También colaboran efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente envió medios aéreos y terrestres para apoyar en las labores. Así, se han desplazado tres aviones anfibios de 6.000 litros de capacidad de las bases de Lavacolla y Matacán, en Salamanca, así como un helicóptero Kamov de 4.500 litros de descarga de la base de Ibias en Asturias y un avión de Comunicaciones y Observación de la base de Matacan, que envía imágenes aéreas del incendio en tiempo real, según recoge Efe.
Para trabajar en tierra en la lucha contra las llamas, que han arrasado más de trescientas hectáreas, se encuentran en la zona dos brigadas de refuerzo contra incendios forestales con sus cuatro helicópteros de 1.200 litros de las bases de Laza en Ourense y Tabuyo del Monte en León.
Ribeira: 82 hectáreas
En la provincia de Coruña la jornada de este lunes también se tiñó de humo por un incendio en el municipio de Ribeira, que en la mañana de este martes, sobre las 11:00 hioras, se dio ya por extinguido tras quemar 81,7 hectáreas.
En concreto el fuego se originó en la parroquia de Carreira y afectó en buena parte a terrenos que se encuentran dentro del Parque Natural de las Dunas de Corrubedo. El fuego se inició a las 00:30 horas del lunes y estuvieron trabajado en su extinción 1 técnico, 14 agentes, 27 brigadas, 22 motobombas, 4 palas, 3 helicópteros y 2 aviones.
Otros incendios
Aunque estos tres fuegos fueron los más graves y peligrosos de la Comunidad gallega en las últimas 24 horas, lo cierto es que no son los únicos que han hecho saltar las alarmas de los efectivos de Medio Rural.
En la tarde de este lunes se declaró nivel dos en Vilagarcía, en la parroquia de Cea. En el lugar de Castroagudín fueron desalojadas cerca de una decena de casas por la cercanía con las llamas. También amenazaron el polígono de O Pousadoirro, cuyas naves fueron desalojadas. Dos hidroaviones participaron en el operativo.
En Poio, también este lunes por la tarde, se declaró otro fuego, en concreto en la parroquia de San Salvador. La rápida intervención de la agrupación de Protección Civil y de la Policía Local de este municipio evitó que las llamas alcanzaran unas grandes dimensiones. Finalmente, consumieron cerca de mil metros cuadrados.
También en la provincia de Pontevedra se registró otro incendio en Cambados, en el lugar de O Facho, donde los efectivos de protección civil y los vecinos pudieron sofocar las llamas y evitar que el fuego se expandiera.
En O Porriño ardieron tres hectáreas de arbolado en la parroquia de Budiño, y en Baños de Molgas se quemaron 2,5 hectáreas.
En concreto, en Caldas y Cotobade han ardido hasta 400 hectáreas, 150 en Mondariz y 70 en Ribeira, el único que se mantenía bajo control y que a media mañana de este martes se daba por extinguido.