Llegan unos días de tregua. Este lunes se ponía fin a la ola de calor que ha acompañado a Galicia en la última semana y los termómetros alcanzaron las temperaturas más altas de todo el verano. Todo ello obligó a desplegar la alerta naranja en algunos puntos del interior, donde los medidores alcanzaron los 42 grados en Ourense. Se espera que a partir de este martes se note un ligero descenso que se irá ampliando a lo largo de la semana y que podrían obligar a sacar las chaquetas del armario, ya que se espera que las mínimas desciendan hasta cerca de los 10 grados en algunos puntos de la Comunidad gallega. Sin embargo, está previsto que el calor vuelva este fin de semana.
En todas las ciudades gallegas se superaron este lunes los 30 grados. Una situación anómala que con toda probabilidad se repetirá este fin de semana. La meteorología dará un respiro a los concellos gallegos que hasta en este inicio de semana se encontraban en alerta naranja, es decir, localidades en las que existía un riesgo debido a las temperaturas tan elevadas. Las zonas que tuvieron que soportar valores más extremos fueron el interior de Coruña, el sur de Lugo y los concellos que baña el Miño en Ourense y Pontevedra. Fueron más de 80 los municipios que superaron los 37 grados, entre los que destacó Ourense, el único de todos que superó la barrera de los 40.
Buena parte del resto de la Comunidad gallega tampoco se libró de estar hasta ayer bajo advertencia, en este caso amarilla, por alcanzar temperaturas por encima de los 34 grados, como ocurrió en el litoral de Pontevedra y en el suroeste de Coruña. La ola de calor, que comienza a trasladarse hacia el este de la Península, dará este martes sus últimos coletazos en Galicia. Solo Ourense alcanzará mañana temperaturas por encima de los 30 grados. Concretamente, las máximas de la ciudad del sudeste gallego llegarán como mucho a los 34, casi diez grados menos que los que se registraron ayer. En el resto de la comunidad los valores se restablecen, y mientras Coruña y Vigo tendrán las mínimas más suaves con 22 y 23 grados respectivamente, Ferrol y Pontevedra llegarán a los 25, mientras en algunas zonas de Lugo y Santiago el mercurio podrá alcanzar los 28.