“Es un error del Gobierno de España que no atienda una propuesta razonada, pero mientras yo siga en el cargo seguiré pidiéndola”. Así de rotundo se mostraba este jueves Alberto Núñez Feijóo, en la transferencia del Gobierno central al autonómico sobre Autopista del Atlántico (AP-9). Con esta rotundidad, el presidente de la Xunta insiste en que no pude decir “más veces” cuál es su opinión acerca de quién debería gestionar la AP-9. Feijóo insiste en el cambio de titularidad, más ahora en pleno proceso de venta del vial.
El jefe del Ejecutivo gallego cree que el vial "puede y debería ser gestionado" por Galicia, de ahí que considere "un error" la negativa del Ministerio de Fomento, que dirige en funciones Ana Pastor, a transferir la infraestructura a la comunidad.
"Es un error que el Gobierno de España no atienda a una propuesta razonada y razonable de Galicia", ha sentenciado, en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, en la que ha celebrado que haya "consenso" entre los grupos políticos gallegos en relación a esta reivindicación.
Y es que dicha petición ha vuelto a colocarse sobre la mesa en el marco de las informaciones sobre la oferta lanzada por el grupo Globalvía para adquirir el 45 por ciento de Itínere, concesionaria de la AP-9.
Al respecto, el presidente ha recordado que la transferencia ya se ha solicitado, con la negativa de Fomento, al tiempo que asegurado que la Xunta estará pendiente de cualquier exploración de "distintos fondos o intereses" que busquen captar participación de acciones en la AP-9.
"Necesitamos que la concesionaria sea solvente, con unos estándares de calidad necesarios y que las obras comprometidas sigan, independientemente del accionariado. Nuestra postura es clara: velar por la calidad del servicio", ha aseverado el presidente.
“No lo puedo decir más veces”
En cuanto al traspaso, ha remarcado que él no puede decir "más veces" cuál es su opinión acerca de quién debería gestionar la vía y ha advertido que "no" cambiará "de criterio ni de propuesta".
Así, ha recalcado que sigue pensando que la autopista "puede y debería ser gestionada" por Galicia, aunque el Ministerio de Fomento alega la existencia de "una discusión jurídica y técnica" acerca de si "une dos países".
Para la Xunta, sin embargo, es "evidente" que la autopista "no termina en Portugal, sino en la autovía de Vigo-O Porriño". "Nace en Galicia y finaliza en territorio gallego y antes de Portugal", ha concluido.