La Comisión Europea (CE) pidió a las autoridades españolas una nueva investigación "independiente" de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF) sobre el siniestro del Alvia en Angrois, durante el procedimiento que abrió a España en septiembre de 2013 y que se cerró en mayo.
La CE solicitó a las autoridades españolas que "abrieran una nueva investigación independiente" sobre el accidente, ocurrido el 24 de julio de 2013 y que causó 80 muertos, indicaron este viernes fuentes comunitarias.
Las fuentes añadieron que, durante el procedimiento de infracción, España se comprometió a tomar medidas "que fueron adoptadas", lo que permitió cerrar el expediente.
Entre los cambios introducidos por las autoridades, mencionaron que en el futuro Renfe y Adif no formarán parte del equipo de pesquisas, la obligación de consultar a las víctimas antes de iniciar una investigación final y la no utilización de asesoramiento externo cuando se analicen accidentes "serios".
La portavoz de Acción Climática y Energía, Anna-Kaisa Itkonen, quiso "separar" en la rueda de prensa diaria de la CE ese expediente del informe publicado por la Agencia Ferroviaria Europea (ERA), que afirma que la CIAF "no aseguró la independencia de la investigación".
Otras fuentes comunitarias precisaron que, sin embargo, "corresponde a las autoridades españolas decidir si abren o no otra investigación".
"La Comisión seguirá vigilante a cualquier desarrollo futuro relativo a la seguridad ferroviaria en España", añadieron, al tiempo que consideraron "prematuro" especular sobre una acción específica.
Preguntada por la razón por la que el documento se ha hecho público una vez cerrado el procedimiento de la CE, Itkonen explicó que la ERA tenía de plazo hasta el 7 de julio para publicar su informe técnico y que "las normas se han cumplido" y forman parte del procedimiento interno de la institución. Itkonen añadió que, aunque el texto se hizo público el jueves, la CE había tenido acceso al mismo, que se tuvo en cuenta durante el procedimiento.
El informe de la ERA, hecho público este jueves, afirma que la investigación de la CIAF "se concentra en la causa directa, un error humano" (el del maquinista del tren), pero "no responde a preguntas esenciales sobre las causas raíz del accidente".
La ERA subraya en sus conclusiones que la CIAF no cumplió con los requerimientos de independencia que establece la directiva comunitaria y que "la obligación de investigar accidentes no se ha cumplido adecuadamente".
En concreto, el documento indica que hay "preguntas sin responder" sobre la inclusión en la investigación de Renfe, Adif e Ineco.
"La Agencia Ferroviaria Europea considera que el accidente no ha tenido la independencia en la investigación que requiere la normativa comunitaria", sentencia el informe.
La CIAF, tras conocer la valoración de la agencia europea, señaló que el análisis que realizó sobre el siniestro y sus causas poseía un "alto nivel de calidad en cuanto al estudio de los aspectos tanto técnicos como operativos".
El portavoz comunitario de Transporte, Jakub Adamowicz, explicó cuando se cerró el expediente a España que el informe de la Agencia Ferroviaria Europea no iba dirigido a abordar la responsabilidad del siniestro ni era parte de ninguna investigación judicial. "Su único propósito es alimentar un procedimiento de infracción anterior al accidente", recalcó.
La CE ya había desvinculado el informe interno elaborado por la ERA sobre la seguridad ferroviaria en España del accidente y apoyó que no se hiciera público.