La caída del paro en mayo confirma que la recuperación económica es una realidad que ya se nota en el mercado laboral. Los datos arrojan una bajada del desempleo en Galicia que, con 7.689 parados menos que el mes anterior, dobla la caída del paro. Este descenso se interpreta como un aval a la gestión económica en los últimos cuatro años. Y los datos muestran la fotografía de una legislatura muy centrada en atajar el problema del paro y en la puesta en marcha de la reforma laboral.
En el conjunto de España se confirma que el drama del paro tocó fondo, ya que por primera vez en seis años, el número de parados baja la barrera de los cuatro millones de personas. Sin embargo, aún queda mucho por hacer. Y una prueba de este problema es que en Galicia todavía hay 220.464 personas que quieren trabajar sin poder hacerlo.
Reducir la temporalidad es otra de las asignaturas pendientes del mercado laboral. Sin embargo, mayo dejó un dato esperanzador en este sentido. Pero hay otro dato preocupante: la caída real de la población activa -que, aunque aumentó en casi 12.000 afiliados a la Seguridad Social, contrarresta con el problema demográfico- refleja que son muchos los gallegos que ya no buscan empleo porque han emigrado o porque consideran que no lo van a encontrar.
Con vistas a un futuro a corto y medio plazo, sería una lástima que la inestabilidad política y el deseo de algunos partidos de derogar la reforma laboral dieran al traste con lo conseguido hasta la fecha en materia de empleo. Pese a que aún queda mucho camino por andar para poder hablar de una recuperación total de nuestro mercado laboral, los datos indican que se va por la senda adecuada. Consolidar esa tendencia debe ser prioritario para los próximos gobiernos de España y Galicia.
