La multinacional norteamericana ha vuelto a ser noticia. Después de que hace unos días saltase la noticia de la posible venta de sus plantas en Galicia, Alcoa prosigue con su actividad. Y es más, independientemente de su inmediato futuro, el gigante del aluminio quiere garantizar los tráficos de alúmina y coque desde el Puerto de Coruña para los próximos años. De hecho, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publica este sábado el inicio del trámite sobre la solicitud presentada por Alcoa para trasladar sus tráficos al Puerto Exterior de Punta Langosteira, abandonando por tanto las instalaciones que viene utilizando en el muelle de Batería.
Así lo ha confirmado la Autoridad Portuaria de Coruña que, a través de un comunicado, precisa que la empresa ha solicitado una concesión por un plazo de 50 años en el nuevo muelle de 300 metros de longitud que se está construyendo en Punta Langosteira.
La concesión incluye 5.000 metros cuadrados de superficie terrestre y 1.900 metros cuadrados de lámina de agua para el atraque de buques, si bien la lámina de agua y 3.000 metros de la parcela podrán ser utilizados también por otros operadores.
Serán de uso exclusivo por Alcoa los 1.300 metros cuadrados en los que construirá su terminal, formada por un sistema de almacenamiento de alúmina y las instalaciones auxiliares. Dicho sistema estará conectado al muelle mediante una tubería subterránea por la que se canalizará la descarga de la alúmina.
El traslado de Alcoa, ha destacado la Autoridad Portuaria, se suma al de otros operadores que ya cuentan con concesiones en el Puerto Exterior, como son Terminales Marítimos de Galicia, Pérez Torres, Galigrain y Hormigones Carral, corroborando así las buenas prestaciones que ofrece Punta Langosteira, donde ya se han superado los dos millones de toneladas de mercancías cargadas y descargadas.
Asimismo, ha destacado que supone un paso muy importante en el proceso de liberación de espacios en el puerto interior. Con la marcha de Alcoa, en el muelle de Batería solo quedarán unos silos de cemento, que están sin uso desde hace años, y una nave de la Autoridad Portuaria, por lo que el traslado de Alcoa supondrá de facto la liberación de este muelle de cualquier actividad portuaria.
Con respecto al muelle de Calvo Sotelo, están avanzadas las conversaciones para que también se concrete el traslado de los actuales concesionarios.
