La secretaria general del PSOE en Ferrol, Beatriz Sestayo, defendió haber recibido el apoyo "inequívoco" de la ejecutiva local que dirige en la reunión extraordinaria en la que puso su cargo a disposición, donde se rechazó su dimisión. Pero no hubo unanimidad. Según publica La Voz de Galicia, tres de sus miembros -en total el órgano está compuesto por 22- votaron en contra de las decisiones que allí se tomaron, entre ellos, una integrante de su grupo municipal, Rosa Méndez. Fue una de los tres concejales que permanecieron en el pleno cuando Sestayo y otro edil se ausentaron para no debatir ni votar una moción del PP para instar a la firma del contrato de Navantia de las corbetas para Arabia Saudí. La teniente de alcalde eludió este viernes aclarar los motivos de esta polémica decisión, que le ha supuesto la pérdida de apoyos internos, como tampoco quiso hacerlo su compañero Bruno Díaz. La socialista buscó el aval de la ejecutiva ferrolana ante esta medida, aprobando un punto con el que pretende cubrirse las espaldas de cara a venideras situaciones: “El Partido Socialista valorará ausentarse ante cualquier presentación de moción que trate de sacar rédito político con hipocresía ante la necesidad imperiosa de carga de trabajo”.
Este punto amenaza con enturbiar las relaciones en el bipartito ferrolano. El alcalde de Ferrol, Jorge Suárez, ya advierte: "Las decisiones que tome el PSOE son soberanas y autónomas", pero “el gobierno, aún que tenga dos partidos, tiene que tener una posición unánime”. Sobre todo, recuerda, porque, “los votos van a ser necesarios en muchas ocasiones”.
Sestayo defendió que "una vez más, y ya van tropecientas a lo largo de tantos años, hay un apoyo inequívoco en la agrupación" y demanda que “se respete la democracia, los órganos del partido y la información veraz”.
