La dirección de la planta de PSA Peugeot Citroën en Vigo ha planteado hasta el próximo año 2018 un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) extintivo voluntario para hasta 400 empleados, así como un ERTE suspensivo que podría llegar a afectar a otros 510 trabajadores y otro suspensivo rotatorio para personal de estructura.
Así lo han comunicado a Europa Press fuentes sindicales, tras la constitución en la mañana de este lunes de la mesa negociadora entre la dirección de la planta viguesa y representantes de los trabajadores, que tiene como objetivo la adopción de medidas asociadas a la candidatura de la planta para optar a un nuevo modelo de vehículo.
En concreto, la empresa ha planteado un ERE extintivo entre abril de 2016 y marzo de 2018 al que podrán acogerse de forma voluntaria hasta 400 personas, el cual está orientado prioritariamente a los trabajadores veteranos (de 59 o más años), lo que responde a una petición que persiguen los sindicatos desde hace años.
No obstante, representantes de los trabajadores han subrayado que en la fábrica de Vigo hay unos 180 empleados de este grupo de edad, por lo que han trasladado su sorpresa porque puedan verse afectados otros trabajadores, si bien han dicho que la dirección les ha pedido que estén "tranquilos" y será en próximas reuniones cuando se les aporte más datos al respecto.
Fuentes de la empresa han manifestado a Europa Press que el propósito de esta medida es responder a la demanda de salida del personal de mayor edad en un momento en que ven "factible" asumir el ERE y lograr con ello "aligerar la estructura", pero también ofrecer un mecanismo para la salida de personal que, sin superar los 58 años, quiera acogerse. Con esto, esperan hacer frente al periodo de transición que se abre en la actualidad hasta la industrialización de nuevos modelos.
En cuanto al ERTE suspensivo, tendrá una aplicación de dos años, una duración de 20 días (a razón de 10 por año), las mismas condiciones que el actual (que caduca este 31 de marzo), y será complementario a medidas de flexibilidad como la bolsa de horas. Así, esta medida está destinada a los trabajadores que deben más de 10 días a la bolsa de horas, con lo que los sindicatos estiman que pueden ascender a hasta 510 trabajadores.
Finalmente, el último de los expedientes propuestos es un ERE suspensivo rotatorio para personal mensual estructural (no ligado a la producción). Las fuentes de la empresa han indicado que se trata de una solución que se plantea para, en caso de que el ERE extintivo no alcanzase las bajas voluntarias necesarias, ajustar los excedentes de personal si se da la previsión de producción "más desfavorable".
Otras medidas
Según las fuentes sindicales, además de los ERE la empresa les ha confirmado que para optar por el nuevo modelo (un vehículo trimarca que se produciría en exclusiva mundial) no hará falta ajustes salariales pero sí que les ha trasladado la necesidad de fortalecerse mediante la optimización de la producción y del 'sourcing', la disminución de la inversión, una mayor eficiencia en los procesos, el apoyo de la administración pública y reforzando la flexibilidad del centro.
Acerca de este último punto, los sindicatos han señalado que la dirección les ha reconocido que las medidas de flexibilidad adoptadas en el pasado les dejan en "buen sitio" pero "no son suficientes" para la llegada del nuevo modelo, con el que afrontarán "volúmenes de producción nunca vistos en Vigo y superiores al récord", que vendrán "acompañados de la creación de empleo".
La empresa ha especificado que las nuevas medidas de flexibilidad buscan dotar a la planta de Vigo de capacidad de reacción según la evolución de mercado "de forma ágil y con buenas condiciones de costo y plazo". Así, ha subrayado que en la actual coyuntura es necesario "adaptar los mecanismos" y plantear otros nuevos "al alza" para poder afrontar posibles subidas de producción "sin grandes inversiones".
Está previsto que estas negociaciones (en las que hay una docena de representantes de los trabajadores: 7 del SIT, 2 de UGT, 1 de CIG, 1 de CUT y 1 de CIG), sigan desarrollándose a lo largo de los próximos días, concretamente los próximos días 2, 4, 7 y 9 de marzo, aunque el proceso puede prolongarse si resulta "necesario".
Posición sindical
El portavoz de UGT, Rubén Pérez, ha afirmado en declaraciones a Europa Press que el sindicato no aceptará "ninguna medida obligada" y en cuanto al ERE, ha dicho que están abiertos a ponerlo encima de la mesa para los que quieran irse, "pero con garantías suficientes", y ha considerado "sorprendente" y "preocupante" que el número de empleados propuesto supere al de veteranos.
Además, en lo relativo a las medidas de flexibilidad ha comentado que también están dispuestos a planteárselo pero siempre que se cumpla el binomio medidas de flexibilidad y creación de empleo. A mayores, ha pedido que los trabajadores con contratos de relevo sean considerados "una prioridad" y se les consolide en cuanto sea posible.
El representante de CCOO, Santiago García, ha aseverado que valoran "positivamente" la propuesta de ERE porque los veteranos "empiezan a ver la luz al final del túnel", no obstante también se ha mostrado sorprendido por el elevado número de empleados propuesto y ha pedido más información. Asimismo, sobre las medidas de flexibilidad, ha reivindicado que la plantilla ya ha asumido "demasiados esfuerzos y ha reclamado "poner en valor los sacrificios hechos".
Por su parte, el responsable de la CUT, Vítor Mariño, ha criticado que con el ERE extintivo se está "enmascarando otra salida de trabajadores" a los que cree que se va a "presionar" para que accedan a acogerse a este expediente o se les abocará a una "salida forzada" y ha censurado que finalmente pese al anuncio del K9, "no se va a crear empleo".