Primero fue la huelga del servicio de limpieza; horas, son los tractores. Lugo se ha convertido en una ciudad tomada por los huelguistas, y ni las autoridades y ni los agentes implicados en el conflicto parece que vayan a poner fin a esto.
Una huelga legal no justifica el caos que sufre la ciudad de las murallas, ni el comercio que se ve afectado por unas protestas que van en contra de la capital lucense.
Todos los agentes implicados en esta protesta están mostrando un grado elevado de irresponsabilidad. No es aceptable que las distintas instituciones se hayan quitado de en medio del conflicto con el argumento de que la movilización es un asunto entre productores y demás empresas del sector lácteo.
Si los ganaderos con su actitud de tomar las Ronda de la Muralla con sus tractores son irresponsables, las empresas del sector tampoco están libres de esa irresponsabilidad.
En cuanto a las diferentes administraciones, es evidente que no han sabido frenar de raíz la toma de la ciudad por parte de los productores con sus tractores. El Ayuntamiento lucense debería tomar la iniciativa para evitar el caos que sufre la ciudad. Lo mismo que los ganaderos, que están perdiendo el apoyo ciudadano con su actitud irresponsable. Lugo no se merece esto.
