La representación legal del exalcalde de Lugo José López Orozco en el llamado caso Garañón ha presentado en la mañana de este viernes un escrito dirigido al Juzgado de Instrucción número 2 de Lugo en el que anuncia que si el letrado que defiende a José Ramón Gómez Besteiro, Cándido Conde-Pumpido, "no rectifica", se encontrará con "una querella por calumnias".
Ese escrito hace referencia al correo electrónico que le remitió el letrado a la juez Pilar De Lara cuando todavía no representaba a Gómez Besteiro y que figura, reproducido literalmente, en el informe que ha remitido la instructora a la Audiencia Provincial para defender su competencia en el llamado caso Garañón.
"El alcalde Orozco"
Se trata del e-mail en el que Conde-Pumpido advierte a la instructora de que hay "un primer frente" contra ella, que "habría realizado movimientos en el Consejo -General del Poder Judicial- y estaría preparando una querella", en este caso directamente relacionado con el "alcalde Orozco".
Según el abogado, "ese grupo" estaría "haciéndole desviar la atención" hacia "otros miembros del partido por un supuesto piso regalado y unas obras no satisfechas", porque "piensan que va a hacer el ridículo con esa tema cuando aparezcan los pagos tanto de la vivienda como de las obras" de la casa del propio Gómez Besteiro.
"Creo que incluso pudieran estar haciéndole llegar rumores falsos para acrecentar su sensación de la existencia de algún ilícito, tanto para hacerle quedar mal, como también en parte fruto de las guerras de poder internas", añade.
Para los abogados de López Orozco, "es palmario que el señor Conde-Pumpido está acusando a mi mandante de un complot para coaccionar a doña Pilar de Lara, lo que es absolutamente falso y dará lugar, si dicho letrado no rectifica, a la presentación de una querella por calumnias".
En todo caso, reconocen que "llama la atención" que la jueza haya sacado "a relucir ahora un e-mail que recibió del señor Conde-Pumpido el 11 de junio de 2014, cuando dicho letrado ni siquiera era abogado de José Ramón Gómez Besteiro".
En ese sentido, inciden en que "estamos ante una cuestión privada entre un abogado y la señora magistrada que se produjo hace más de un año" y que "ha permanecido en secreto hasta que doña Pilar de Lara ha decidido oficializarlo en las diligencias, sin que el señor López Orozco tuviera conocimiento alguno de su existencia hasta el día de ayer".
Por ello, en el escrito presentado ante el juzgado se preguntan abiertamente si "tuvo algo que ver lo que en la conversación privada le contó a la jueza el abogado Conde-Pumpido" para que "el 16 de octubre" la instructora "imputara al señor López Orozco en estas diligencias por un supuesto delito contra la ordenación del territorio".
"Tenemos la impresión", añade, de que esa "conversación" y "el cruce de correspondencia entre ambos" indican que "su relación privada fue satisfactoria hasta que, por razones que ignoramos, quebró su bonanza y la señora jueza ha roto con el letrado y ha traído a la causa el tejemaneje".
Por ello, pide a la magistrada que explique "qué es lo que ha pasado y su porqué", porque José López Orozco se ha visto "menoscabado por el enredo".
Solicita, en concreto, que explique "qué subyace tras su relación, otrora amistosa y ahora enconada, con el letrado Cándido Conde-Pumpido Varela".
"Acudir a ninguna conspiración"
En declaraciones a Efe, uno de los letrados que lleva la representación legal de López Orozco, Gregorio Arroyo, afirmó que están "absolutamente convencidos de su inocencia" y "por consiguiente" no tienen que "acudir a ninguna conspiración".
De hecho, afirmó que se trata de un "tema grave", porque la acusación velada que figura en ese correo electrónico es "absolutamente falsa" y "no se corresponde para nada con la realidad", porque "el señor López Orozco ha usado los cauces procesales, con la dureza conveniente en cada momento, pero sin salirse de ellos".
También opina el letrado que estas situaciones se producen por el retraso que acumula la instrucción de la causa, lo que hace que se vaya "consumiendo en su propia salsa".
"Esto tenía que estar resuelto hace mucho tiempo" y "aquí estamos todavía después de cinco años esperando una resolución definitiva", lamentó.