La organización política europea Partenalia ya incluye a la Diputación de Ourense entre su lista de gobiernos locales intermedios. Solo seis días después de aprobarse en pleno el regreso de la institución provincial a este colectivo, la asamblea de Partenalia, que se desarrolla entre este jueves y viernes en Castellón, ratificó su ingreso.
A esta cumbre, que cuenta con la presencia de representantes de gobiernos provinciales y de administraciones locales intermedias de España, Francia, Bélgica, Italia, Reino Unido y Croacia, ha acudido el propio presidente de la Diputación, Manuel Baltar, que destacó al término de la primera jornada que la entrada en Partenalia supone "un posicionamiento claro de Ourense y de su gobierno provincial en el contexto de las administraciones públicas y de los territorios que cuentan con una visión de futuro".
Para Baltar, es importante compartir experiencias con gobiernos locales intermedios de otras naciones "es importante tener una posición de liderazgo dentro de las diputaciones de España". Este viernes se celebrará, dentro de esta asamblea, la reunión del consejo político de Partenalia, en la que, dentro de otros asuntos, se firmará un acuerdo de colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).
Precisamente, Manuel Baltar fue elegido el pasado mes de septiembre miembro de la junta de gobierno de la FEMP, algo que permitirá reforzar el papel nacional e internacional de la Diputación a través también de la Fundación Democracia y Gobierno Local, en la que participa, y la propia Partenalia.
Destacando la importancia del trabajo colectivo en beneficio del desarrollo territorial, el mandatario ourensano defendió la necesidad de crear una asamblea europea de las provincias, en la que estarían representados los municipios de los estados miembros de la Unión Europea a través de sus respectivos gobiernos locales intermedios, "que permitiría dar voz a la provincia y a los pequeños y medianos concellos".
Además, Baltar apostó por un trabajo conjunto para la puesta en marcha de proyectos que mejoren ámbitos como el tecnológico, los servicios sociales o las infraestructuras, a través de una gestión coordinada de servicios, siguiendo el modelo de la Diputación que preside.
