El fiscal y el letrado de la acusación popular han sostenido en la primera jornada del juicio del caso Asunta que se desarrolla en abierto que Rosario Porto y Alfonso Basterra tenían "un plan" para asesinar a su hija adoptiva. Por su parte, los abogados de la defensa han asegurado que no existe "prueba de cargo" y han apelado a los miembros del jurado popular por la trascendencia de su papel en este proceso. Cada parte ha pedido nuevas pruebas -a excepción de la acusación popular, que se adhirió a las de Fiscalía- y ahora el tribunal del jurado deberá decidir sobre ellas. El juicio se retoma este jueves a las 9:30 horas, cuando se prevé que empiecen las declaraciones de los acusados.
La Fiscalía y la acusación popular han mantenido este miércoles sus peticiones de pena para los padres de Asunta Basterra Porto, acusados de la muerte violenta de la niña hace más de dos años, al igual que han hecho las defensas, que se han reafirmado y continúan solicitando la libre absolución.
El representante del Ministerio Fiscal, Jorge Fernández de Aránguiz, ha defendido que son responsables como coautores de un delito de asesinato "con alevosía" y con el agravante de parentesco, puesto que idearon un plan "de común acuerdo" y por ello solicita para cada uno de ellos la pena de 18 años de prisión.
La acusación popular que ejerce la asociación Clara Campoamor también ha mantenido su escrito de calificación en el que sostienen que tanto el padre como la madre de Asunta idearon y ejecutaron conjuntamente el plan para asesinar a su hija, por lo que piden la pena máxima para Basterra y Porto, de 20 años de prisión.
Sin embargo, la Fiscalía sí que ha reclamado nuevas pruebas para el desarrollo del caso, como la prueba testifical de la funcionaria que atendió a los padres de Asunta "el día en el que se presentaron en el juzgado para pedir que le dejasen incinerar el cadáver de la víctima".
Otra de las pruebas que ha pedido incorporar ha sido ejemplares de dos periódicos gallegos de la primera semana de la instrucción, en los que aparecieron filtraciones sobre qué cámaras de seguridad de la ciudad de Santiago "pillaron" a Rosario Porto con la hija en el coche en dirección a la casa de Teo.
"Mi tesis es que Rosario Porto (a través de estas publicaciones) cambia de declaración porque se supo que las cámaras la tenían pillada", ha explicado.
Acusación particular
El abogado de la acusación popular que ejerce en el caso Asunta la asociación Clara Campoamor, Ricardo Pérez Lama, ha advertido de que "tan autor del asesinato es el que asfixia como aquel que ejecuta o realiza todos los hechos necesarios para que esa sofocación se produzca".
Así lo ha dicho ante el jurado popular, el presidente del tribunal y los letrados de las distintas partes en la sala de los juzgados de Santiago en la que Rosario Porto y Alfonso Basterra, acusados de asesinar a su hija Asunta, asisten a la segunda jornada del juicio -la primera pública- que trata de esclarecer esta muerte violenta.
Después del turno del fiscal ha tomado la palabra este abogado, quien, tras relatar los hechos que ve "objetivos" y que llevan a que los acusados tenían "un plan" para acabar con la vida de la menor, se ha adherido a la solicitud de nuevas pruebas efectuada por el representante del Ministerio Público, pero no ha demandado nada más por su parte.
A continuación se ha dictaminado un receso en el proceso, que arrancó sobre las 10:00 horas y al que Porto y Basterra asisten con diferentes actitudes: abatida y por momentos ida o con rostro enfadado ella y reflexivo pero nervioso él, que ha llegado a meterse las manos en los bolsillos en algún momento.
Tesis de las defensas
El abogado defensor de Rosario Porto, la madre adoptiva de Asunta Basterra, insiste en la tesis apuntada desde un principio. José Luis Aranguren mantiene que el caso está "mal enfocado" desde el principio, al ser rechazadas otras posibilidades de investigación en la línea del pederasta de Ciudad Lineal. Una tesis hilvanada al caso tras la aparición de semen en una camiseta de la pequeña.
Aranguren ha solicitado incorporar "impresiones" de medios digitales en los que se describen las características de las víctimas del pederasta de Ciudad Lineal, cuyo "modus operandi" ha vinculado con el crimen que acabó con la menor.
Junto a esta petición, el letrado ha trasladado al jurado a popular y al presidente del tribunal su intención de presentar varias pruebas más, entre los que se encuentran documentos y oficios.
También ha renunciado a dos testigos, pero ha pedido dos nuevos, el portero del piso en el que vivían los padres de Porto y otro que "ratificaría" que esta abrió una cuenta a nombre de la niña que "sigue ahí intacta".
"Al final de todo no habrá una sola prueba que pueda convencerles de la culpabilidad", ha aseverado Aranguren interpelando a los miembros del jurado y antes de asegurar que él no debe demostrar la inocencia de la madre de Asunta. "Doña Rosario no fue, y punto final. Se acabó", ha enfatizado.
Por su parte, la abogada de Alfonso Basterra. Belén Hospido señaló que "nosotros compartimos el criterio (en relación a la defensa de Rosario Porto) de que no hay pruebas de cargo para condenarlos por algo que a día de hoy creemos que es un misterio, pero se trata de aclarar que todo lo que hizo Basterra tiene su explicación y no tiene que ver en absoluto con los hechos que se nos imputan en el escrito de acusación".
La letrada, que se esforzó en destacar el componente emocional del caso al señalar que no hay nadie más afectado por el crimen que los padres -los dos se sientan en el banquillo-, asegura que nunca se ocultó el portátil y que no hay prueba de cargo que sustente una condena. El ordenador fue localizado en la casa de Alfonso, encima de una mesa, después de que los agentes ya hubieran registrado el piso ubicado en Santiago con anterioridad.