El Comité Federal de Ética y Garantías del PSOE ha ratificado la expulsión del exalcalde de Vigo, Carlos Príncipe, tras rechazar el recurso presentado por éste, y ha declarado que la decisión de la agrupación socialista viguesa de proponer su expulsión es adecuada por la "gravedad" de la falta cometida.
En octubre de 2014 la agrupación del PSOE en Vigo abrió expediente disciplinario a Príncipe por sus críticas públicas hacia el gobierno municipal de Vigo, encabezado por Abel Caballero, así como hacia cargos del partido. En diciembre, se resolvió expulsar al exalcalde, que recurrió esa resolución, alegando la "manifiesta indefensión" a la que era sometido, así como "falta de prueba lícitamente practicada".
En agosto, el Comité Federal de Ética y Garantías del partido ha emitido una resolución en la que considera que las declaraciones de Carlos Príncipe "traspasan con mucho los límites de los aceptable entre compañeros de un mismo partido".
Así, este órgano entiende que las manifestaciones y posicionamientos públicos del exalcalde vigués han supuesto un "claro daño a la imagen del PSOE y de sus dirigentes, máxime cuando el partido gobierna en la ciudad". Por ello, ha determinado que el acuerdo de expulsión del PSOE es "proporcionado", en una resolución contra la que no cabe recurso.
Por su parte, Carlos Príncipe, en declaraciones a Europa Press, ha anunciado su intención de recurrir a los juzgados para defender sus derechos, y se ha mostrado "convencido" de que los tribunales le darán la razón, porque "nadie puede expulsar a nadie de un partido por decir la verdad".
Operación Patos
Príncipe ha señalado que todas sus afirmaciones sobre las supuestas irregularidades en el Ayuntamiento de Vigo, en relación con "enchufes, amaños de contratos, y prórrogas de concesiones", han resultado "confirmadas por jueces y fiscales".
"El PSOE en Vigo tiene un problema, y no son mis declaraciones, sino los actos de supuesta corrupción que han podido cometer los concejales Rivas y Regades, que han sido testaferros del señor Caballero", ha incidido, y ha añadido que el alcalde "no debe engañar, todos saben que en el gobierno no se mueve nada sin que él lo sepa".
Finalmente, ha subrayado que la operación Patos, en la que han resultado imputados el propio Caballero y tres de sus ediles, "es una gota de agua en un pantano de porquería", y ha señalado que es muestra de un "sistema corrupto en el que participan PSOE y PP, que se tapan entre ellos sus miserias".
