La proliferación de fuegos sufrida por la provincia de Ourense durante este último fin de semana se traducía en casi 3.000 hectáreas arrasadas, sumando las más de 700 registradas en los incendios del sábado y las 2.000 que se producían en el fuego producido en Cualedro al mediodía de este domingo. Desde julio ya son 6.000 las hectáreas calcinadas y desde junio de 2015, más de 7.000 las arrasadas por los sucesivos fuegos. Las altas temperaturas registradas durante los días pasados, junto con el fuerte viento del domingo, contribuyeron a la propagación de los numerosos incendios.
Medio Rural anunciaba este domingo que había conseguido controlar, aunque no extinguir, cuatro de los cinco fuegos que se produjeron durante la jornada del sábado, entre ellos el que prendió a las puertas de la ciudad, en Cudeiro. Este incendio, que mantuvo en vilo a varios vecinos de la zona preocupados por sus casas durante varias horas -se inició a las 16:10 horas y no se dio por controlado hasta las 00:20 horas-. Arrasó, según estimaciones provisionales de la consellería, 54,9 hectáreas de monte raso. En su extinción, intervinieron un técnico, 10 agentes forestales, 25 brigadas, 20 motobombas, dos helicópteros y nueve aviones.
Igualmente, se daban por controlados durante la jornada de ayer los fuegos producidos en Manzaneda, Pexeiros (Viana) y O Barco. El primero de ellos se iniciaba a las 15:30 horas en la parroquia de Cernado y no conseguía ser controlado hasta las 7:51 horas del domingo. De especial relevancia fue el poder destructivo de este incendio, que afectó a 250 hectáreas de un espacio de la Rede Natura. En su extinción tomaron parte un técnico, siete agentes forestales, 23 brigadas, seis motobombas, dos palas, cuatro helicópteros y dos aviones.
En el de O Barco, registrado en la parroquia de Santigoso a las 16:35 horas del sábado y que no fue extinguido hasta la noche de ayer tras quemar 66,9 hectáreas (cinco de arbolado). Participaron en las tareas de extinción 11 agentes forestales, 19 brigadas, nueve motobombas, una pala y dos helicópteros.
También quedó bajo control uno de los fuegos producidos en Viana, el iniciado a las 13:40 horas en Pexeiros, que arrasó una superficie de 70 hectáreas. Fue necesaria la intervención de nueve agentes forestales, 15 brigadas, ocho motobombas, dos palas, siete helicópteros y dos aviones.
Permanecía estabilizado a última hora de la noche el otro foco registrado en Viana, en Pradocabalos, que ya había quemado 213 hectáreas y mantenía pendientes de apagarlo un técnico, nueve agentes forestales, 32 brigadas, 13 motobombas, cinco palas, nueve helicópteros y seis aviones.
En la jornada de este domingo, junto con el gran incendio de Cualedro, que a última hora de ayer ya había arrasado 2.000 hectáreas y concentró la mayoría de los esfuerzos de Medio Rural desde su inicio a las 12:12 horas, se detectaron otros dos focos de mucha menor entidad en los municipios de Xinzo y Muíños.
El primero de ellos afectaba a la parroquia de Guntimil a las 16:20 horas y en su extinción, que no se conseguía hasta dos horas más tarde, tomó parte una brigada. Medio Rural estima que se quemaron tres hectáreas y media de raso.
El otro foco se producía a las 18:15 horas en la parroquia de Farnadeiros, en el municipio de Muíños, y permanecía activo a última hora de la tarde de este domingo. El dispositivo de extinción cuenta con un agente forestal, cuatro brigadas, una motobomba y tres aviones, y la última estimación era de tres hectáreas.
A las seis de la tarde se hacían visibles las llamas en la parte alta de Melias (Pereiro de Aguiar), movilizando a ocho aeronaves, seis brigadas y tres motobombas. Al cierre de esta edición seguía activo.