Los incendios siguen sembrando el caos en la provincia de Ourense, y en el municipio de Cualedro el mayor siniestro en lo que va de verano en Galicia. El fuego, que amenazó este domingo el cierre de la A-52 y mantiene en vilo a los vecinos y servicios de emergencias, sigue activo, pero "contenido", según el alcalde de la localidad ourensana. Este lunes ha sido desactivada la alerta de nivel dos que fue declarada por la proximidad de las llamas a las viviendas. El domingo una decena de personas de las aldeas de Lamalonga y Serralleira, esta última en el concello de Trasmiras, según fuentes oficiales, tuvieron que ser desalojadas.
Se trata del incendio más virulento de lo que va de verano, y es que las llamas devoraron alrededor de 250 hectáreas por hora. La Consellería de Medio Rural cifra la superficie afectada en más de 3.000 hectáreas y lo calificó como un gran incendio forestal.
El fuego se originó a mediodía en la parroquia de Lucenza y comenzó a propagarse a gran velocidad, llegando a decretarse como medida preventiva el nivel de alerta por acercarse peligrosamente a las casas. Las intensas rachas de viento dificultaron mucho las tareas de extinción, además del calor sofocante que se registró en las horas centrales.
Una motobomba fue alcanzada por las llamas y el conductor tuvo que recibir asistencia médica al resultar herido, si bien tal y como informaron desde la Xunta, las lesiones no presentaban gravedad. En las tareas de extinción participaron un técnico, nueve agentes forestales, veinte brigadas, trece motobombas, dos palas, seis helicópteros y nueve aviones. También fue necesario solicitar la colaboración de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que se movilizó alrededor de las tres de la tarde.
Una historia que se repite
No es la primera vez del verano que el monte arde en el concello ourensanano de Cualedro. Este domingo otro incendio precisó la intervención de sesenta brigadas y afectó a más de trescientas hectáreas. Cabe recordar, además, que en los últimos estíos también fue el escenario de grandes fuegos. Los vecinos miran ahora al cielo con la esperanza que las previsiones de lluvia se hagan realidad, si bien durante el domingo no se cumplieron y los cielos permanecieron despejados durante buena parte de la jornada.
Otros fuegos en Viana
También permanecía activo hasta las 13:21horas de este lunes un incendio en el municipio ourensano de Viana do Bolo, concretamente en la parroquia de Pradocabalos. Las llamas se originaron alrededor de las dos de la tarde. Según las estimaciones que maneja Medio Rural, la superficie afectada ronda las 200 hectáreas y en los trabajos de extinción participan un técnico, nueve agentes forestales, 34 brigadas, 14 motobombas, 5 palas, nueve helicópteros y seis aviones. La consellería lo da por controlado, al igual que el otro que afecta a Viana (70 hectáreas en la parroquia de Pexeiros) desde el sábado y el declarado el domingo en Manzaneda. En este concello las llamas se extienden por 250 hectáreas de territorio protegido de Red Natura.