El diputado provincial de Lugo José Ulla Rocha (PP), responsable del área de Medio Rural del gobierno que preside Elena Candia, confirmó que la Diputación de Lugo todavía no tiene fecha prevista para la apertura del primer centro de recría público de novillas de raza frisona de España, que fue construido en la localidad de Castro de Ribeiras de Lea. Ulla Rocha explicó que la falta de licencia de actividad de esas instalaciones es "un mal menor", porque la empresa concesionaria, Tragsa, ya remitió la certificación final de obra que faltaba para la concesión de ese permiso, que será aprobado por el Ayuntamiento de Castro de Rei en el mes de septiembre.
El diputado popular precisó que el previsible retraso en la apertura del centro se debe "a la inoperancia del anterior gobierno provincial" para "sacar adelante el proyecto estrella" de su presidente, "el señor Gómez Besteiro". Precisó, en ese sentido, que tras consultar a la Dirección Xeral de Ganadería de la Xunta de Galicia, el nuevo gobierno se ha encontrado con "circunstancias lamentables" y "extremas dificultades" para proceder a la apertura de esas instalaciones, dado que por condiciones de "bioseguridad y sanidad animal no se pueden poner en marcha tal y como están en este momento".
"Difícilmente se pueden meter animales ahí"
Recordó que "difícilmente se pueden meter animales ahí", cuando las actuales instalaciones sólo permitirían tratar en torno a un "20% de los residuos" que generarán esas instalaciones. Asimismo recordó que tampoco hay "nada hecho" en las instalaciones dedicadas a la "primera fase" de crianza de las novillas, donde se reemplazará la leche materna por otra alimentación, ni tampoco existe zona de cuarentena para animales enfermos.
Según Ulla Rocha esta circunstancia es debida a que el anterior gobierno no se puso en contacto en ningún momento con la Xunta de Galicia, concretamente con la Dirección Xeral de Ganadería, para corregir las deficiencias que pudiesen surgir en la construcción del centro de recría. El diputado ya avanzó que el nuevo gobierno no autorizará la apertura de las instalaciones hasta que todas esas deficiencias hayan sido corregidas, porque "ningún ganadero va a meter allí a sus animales si no se garantiza su seguridad".