Los incendios forestales, la mayoría intencionados o por imprudencias, no dan tregua a la provincia ourensana. Once incendios han sido declarados desde este viernes a las 20:00 horas hasta este sábado. El último en Sabadelle, a 7 kilómetros de la capital, en la tarde de este sábado. Este punto geográfico de Ourense ha sufrido todas las semanas las llamas y el más importante fue de 21 hectáreas. Dicho fuego se inició el 28 de julio y dos días después se dio por extinguido. Las llamas también arrasaron esta parroquia en intervalos de tiempo: desde el domingo 9 al miércoles 12 y del miércoles 19 al sábado 22. Además, esta zona de Pereiro es una de las más afectadas después de declararse incendios en Vilariño, Melias, Palmés, San Mamede, Castro de Beiro y Velle.
Los más importantes se produjeron en Oimbra y Cualedro. En Oimbra se declararon dos en la misma parroquia de A Granxa; uno se inició a las 00:10 horas y el otro a las 00:29 horas. Ambos se controlaron de madrugada y entre los dos han quemado 71,77 hectáreas. Es una zona de suelo raso en la que existe mucha incidencia de incendios. Precisamente, entre el jueves y el viernes en la misma parroquia de A Granxa el fuego arrasó más de 200 hectáreas.
El de Cualedro, en la parroquia de Montes, quemó 17 hectáreas y se declaró poco antes de las 21:00 y se extinguió a las 2:00 horas. El municipio de Monterrei también es un sector geográfico con mucha incidencia de fuegos.
En lo que va de verano han sido seis hombres los heridos en las labores de extinción. Tres intoxicados por la inhalación de humo, uno en Oimbra, un conductor accidentado en A Rúa y el más grave que se ha quemado la cara y las manos ha sucedido hoy en Carballeda de Valdeorras.