El alcalde de Ferrol, Jorge Suárez, ha reclamado este sábado a la Xunta que active el plan de emergencia, denominado Platerga, para que el Gobierno gallego envíe "todos sus medios materiales y logísticos" -como camiones cisterna- para garantizar el suministro de agua a los más de 70.000 habitantes de la ciudad, ante la prohibición de consumir agua del grifo por el alto grado de contaminación.
Y es que según ha avanzado el regidor, los últimos análisis apuntan a que la prohibición continuará, al menos, 24 horas más, hasta este domingo, y existe "incertidumbre" sobre cuándo se autorizará el consumo humano.
Así lo ha indicado en rueda de prensa tras una reunión con alcaldes y representantes de los municipios afectados -Ferrol, Narón, Fene, Ares y Mugardos- con la jefa territorial de Sanidade, Cristina Pérez, y con la empresa de aguas Emafesa.
En este sentido, Suárez demanda que la Xunta ponga medios materiales y humanos antes las dificultades que tienen los municipios para llevar agua a todos los barrios, pues ha recordado que además de Ferrol, Narón también tiene un tamaño considerable, y Mugardos y Ares ven aumentada su población considerablemente en verano.
Sobre Fene, ha dicho que los datos de los estudios son "muy positivos" sobre el nivel de salubridad del agua, pero contrasta con otras zonas de Ferrolterra como Caranza, donde sigue habiendo elevados niveles de contaminación.
En concreto, Suárez explica que está habiendo ofrecimientos de agua de ayuntamientos como Neda, Valdoviño o Coruña, pero remarca que los municipios no tienen la logística para movilizar camiones cisterna o vehículos especiales, lo que "sí tiene la Xunta".
De hecho, apunta que esta situación "desborda" las competencias municipales, por lo que demanda colaboración de otras administraciones "si esto se prolonga".
Por ello, Jorge Suárez ha explicado que las previsiones de levantar la prohibición se han visto "frenadas", dado que los técnicos de Emafesa determinan que "el problema va a seguir". Con todo, se espera que en la tarde de este sábado haya nuevos resultados de los estudios de la Xunta para saber si es posible abrir al consumo zonas puntuales.
"Aparcar diferencias" y denuncia de la Fiscalía
Tras quejarse de que los alcaldes han conocido los últimos análisis del Sergas a través de su web, sin comunicación oficial, y de que "no hubo comunicación directa" a los ayuntamientos, ha abogado por "aparcar diferencias entorno a las causas del problema que se está viviendo" para trabajar "codo con codo".
Así, el regidor ferrolano confía en que tras "momentos iniciales de tensión" con cruce de acusaciones entre municipios y Gobierno gallego se reconduzca la situación en pro de la colaboración.
Al respecto, ha dicho que será "después" de que se solucione la situación de emergencia, cuando se deban abrir comisiones para dilucidar responsabilidades. Sobre este extremo, se ha referido al hecho de que la Fiscalía de Ferrol haya abierto diligencias sobre la contaminación del agua, y apunta que así se analizará "desde cuándo se viene produciendo" esta situación.
Mensaje de "tranquilidad"
Por su parte, en declaraciones a los medios, la jefa territorial de Sanidade, Cristina Pérez, ha trasladado un mensaje de "tranquilidad", ya que es un problema "puntual", pero que "no va a afectar a la salud" de los ciudadanos, pues tendría que ser un consumo durante años.
Tras recordar que la competencia de la calidad del agua es de los ayuntamientos, ha dicho que la Xunta está abierta a la solución del problema. En concreto, remarca que Sanidade aporta medios logísticos "importantes", con el laboratorio de salud pública abierto todo el fin de semana para hacer análisis permanentes y está abierta a cualquier colaboración que se demande.